El escueto comunicado emitido por la compañía alegó también que “los accionistas realizaron un aporte de capital de USD 5.000.000 durante el corriente año, en pleno contexto de la pandemia, sin que este aporte tenga los efectos deseados, en un ambiente de consumo muy disminuido de su público preferente”.
En este contexto, indica el último párrafo del comunicado que, actualmente, los directivos y accionistas se encuentran abocados en la formulación de un plan integral de reestructuración de la empresa e incorporación de un socio local.
PROTESTA. Entre tanto, los empleados de esta cadena protestaron ayer frente al Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (Mtess), para pedir que sus autoridades tomen cartas en el asunto ante el desconocimiento generalizado existente entre los trabajadores sobre la situación financiera de la empresa.
Ante el requerimiento, la ministra Carla Bacigalupo y el viceministro de Trabajo, Luis Orué, salieron a dialogar con los trabajadores apostados en la calle, ante la amenaza de varios de ellos de encadenarse frente al local de la cartera.
Bacigalupo y Orué les explicaron que la empresa solicitó, hasta el momento, la suspensión de 455 trabajadores de 58 de los 94 locales que posee la cadena.
Pese a que desde hace alrededor de un mes que se especulaba con la crisis de esta marca, su gerente visible, Roberto Aponte, se negó a atender los requerimientos de información de Última Hora.
CIERRE DE TIENDAS. La firma PRV Stores PY Saeca, en su comunicado de ayer, se excusó de que las ventas disminuidas por la pandemia empujaron a la cadena a la actual situación de desabastecimiento. Ante esta crisis de la empresa, trascendió que acumula deudas por alrededor de USD 20.000.000 y que incluso estaría afrontando demandas de algunas de las empresas proveedoras.
La empresa comunicó, además, que los directivos y accionistas se encuentran ideando un plan de reestructuración de la cadena de minimercados con la incorporación de un socio local. Al respecto, un proveedor de Citymarket comentó que un supermercadista local manifestó su interés de comprar una parte de las acciones, pero la venta se trabó debido a que supuestamente los accionistas deseaban vender la totalidad de la cadena.