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Brasilia
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, es un “obcecado por los biocombustibles” y no dejará de pregonar los beneficios de la energía renovable, dijo ayer un alto funcionario brasileño, en una abierta respuesta a críticas del líder cubano Fidel Castro.
Castro, en una nota titulada “La internacionalización del genocidio” publicada en el diario cubano Granma, reiteró sus objeciones a la flamante alianza brasileño-estadounidense de promoción al etanol, y condenó el uso de alimentos como combustibles.
Marco Aurelio García, asesor de política externa de Lula, dijo a periodistas que “está habiendo una cierta incomprensión” de Fidel Castro sobre el desarrollo de energías renovables.
“Está habiendo una cierta incomprensión en la medida en que la posición que el presidente (Fidel) Castro ha defendido es que la producción de biocombustibles crearía problemas para la producción de alimentos”, dijo García.
“En el caso brasileño y de todos los proyectos a los cuales nos estamos asociando no es esa la realidad”, agregó.
PIONERO EN ETANOL. Brasil es pionero mundial en el desarrollo de etanol a base de caña de azúcar y Lula acaba de rubricar acuerdos con su homólogo estadounidense, George W. Bush, para ayudar a países pobres a desarrollar la producción y la industria de biocombustibles.
Brasil también ha firmado acuerdos para impulsar la producción de etanol y biodiésel con varios países de América Latina, entre ellos Bolivia, y sumó el miércoles a esa lista a Ecuador, al que apoyará con su experiencia en el rubro.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, visitó ayer a Lula en Brasilia y anunció que es “decisión del
gobierno de Ecuador apoyar el desarrollo de los
biocombustibles” en sociedad con Brasil.
“Vamos a apoyar a Ecuador en su programa nacional de biocombustibles. Nuestros países están determinados a impulsar esta revolución de energía limpia y renovable, generadora de empleos y capaz de preservar nuestros bosques”, dijo Lula al recibir a Correa.
García, por su parte, indicó que “el problema del mundo no es la falta de alimentos sino la falta de ingresos” e indicó que en Brasil “las tierras para biocombustibles no son apropiadas para la producción de alimentos”.
"(...) Ninguna producción de biocombustibles, a veces hemos escuchado esa objeción, significará el derrumbe de un solo árbol de la selva amazónica”, añadió.
Consultado sobre otras críticas del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, al programa brasileño de etanol, García dijo que “entendíamos hasta hace poco tiempo que Venezuela estaba interesada también en la producción de etanol y biocombustibles (...) no sé si cambió".
El funcionario brasileño, de extrema confianza de Lula, dijo: “No queremos transformar el problema de etanol en un problema ideológico. El presidente Lula es un obcecado por los biocombustibles, no va a ser ahora que va a dejar de hacer propaganda de eso”.
Banco del Sur
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, convocará próximamente a una reunión de ministros de Hacienda sudamericanos para discutir el proyecto del líder venezolano Hugo Chávez de crear el llamado Banco del Sur, que tiene objeciones del Gobierno brasileño. El presidente de Brasil, Lula da Silva, recibió a Correa en una visita en la que firmaron 15 acuerdos para expandir el comercio, la inversión y la cooperación bilateral, y en la que también discutieron sobre la propuesta de creación de ese organismo regional de financiamiento. “Se combinó que el propio Correa invitaría a una reunión de ministros de Hacienda para trabajar las cosas mejor”, dijo el asesor de la Presidencia de Brasil para asuntos de política externa, Marco Aurelio García, en referencia al Banco del Sur. El organismo es visto como un potencial competidor futuro del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), del que EEUU Unidos es el principal accionista.