Según los bomberos, el voraz fuego amenaza seriamente unas 300 hectáreas de bosque natural de espesa vegetación, de los cuales ya se habrían quemado más de 10 hectáreas. El reporte de ayer miércoles habla de que a pesar de la gran e incansable labor, el foco de incendio se habría reavivado por el fuerte viento entre la noche del martes y este miércoles, lo que requirió de una acción mucho más compleja en la zona, con más cantidad de hombres y equipos a fin de extinguir totalmente el fuego, llegando a trabajar cinco cuadrillas con apoyo de vecinos de la zona. Los bomberos amarillos y azules de María Auxiliadora, dispusieron de una gran dotación de hombres y equipos para combatir la quema, que según dijeron fue prácticamente controlado en la jornada del martes luego de horas de lucha; sin embargo, el fuerte viento que soplaba por la tardecita volvió a reavivar algunos focos de fuego y de nuevo el monte se ve seriamente amenazada.
El área boscosa tendría dos dueños, donde la parte más afectada pertenecería a Cristian Hamann y la otra parte seria propiedad de la familia Paredes de la zona de Obligado.
Los bomberos claman conciencia de la ciudadanía ante la situación de sequía que se está viviendo, atendiendo que en muchos casos los grandes incendios son producto del accionar de las personas y no hechos accidentales. AR
