Afirma que el paquete fiscal anunciado por el Gobierno, y el impacto de la actividad en la recaudación, afectan las cuentas fiscales. Resalta que el déficit fiscal acumulado en 12 meses ascendió a -4,8% del PIB en mayo del 2020, luego de ubicarse en -4,4% en abril y -2,8% a fines del 2019.
“El Gobierno anunció nuevo plan de endeudamiento por USD 350 millones adicionales (1% del PIB), asociado al plan de reactivación pos-cuarentena, el cual introduce riesgos al alza a nuestra proyección de déficit fiscal de 6% del PIB”, indica el banco en su reporte.
Otra modificación señalada por dicha entidad bancaria fue la proyección sobre el tipo de cambio del dólar para finales de este y el próximo año. En su informe de mayo Itaú indicó una estimación de cambio para el dólar de G. 6.600 para el 2020 y G. 6.700 para el 2021. Sin embargo, en su reporte de junio menciona que la cotización prevista para la moneda norteamericana asciende a G. 6.700 para el 2020 y a G. 6.800 para el 2021, debido al último reajuste a la baja realizada por el Banco Central del Paraguay (BCP) sobre la tasa de interés de Política Monetaria, dejando la misma en 0,75%.
DECRECIMIENTO. Con relación a la proyección económica y cómo podría cerrar el país este año, el banco mantiene su estimación en un decrecimiento de 2,6% en el 2020 (superior al -2,5% del BCP), con un repunte de 5,1% en el próximo año. La caída está sustentada por Itaú con el derrumbe de la actividad económica en un 12,2% en el mes de abril, señalado en el informe de Indicador Mensual de Actividad Económica del Paraguay (Imaep) del BCP.
Asimismo, mantiene su previsión en cerrar el año con una inflación de apenas el 1,5% -por debajo del parámetro establecido como meta por el BCP (4% ± 2%)-, luego de observar los resultados de marzo, abril y mayo, meses consecutivos con resultado deflacionario (baja de precios) del -0,2%, -0,4% y -0,6%, respectivamente.
También menciona que esperan un superávit de la balanza comercial (más exportaciones que importaciones) por un total de USD 1.200 millones a raíz de las importaciones débiles y la normalización de la cosecha de soja tras un año de sequía en el 2019. Además de una deuda pública equivalente a 31,4% del PIB para el 2020 y 2021, sobrepasando el rango racional y controlable, según los parámetros de organismos internacionales. (Ver la infografía).
Gobierno mantiene sus proyecciones
El Gobierno sigue sosteniendo su proyección económica para el 2020, basada en una caída de 2,5% del PIB a raíz del duro golpe ocasionado por el Covid-19 y sus efectos, tras el aislamiento social aplicado para tratar de controlar la propagación del virus.
Pese a la liberación de varios sectores mediante la cuarentena inteligente, el consumo y la actividad económica siguen muy debilitadas debido a la pérdida del poder adquisitivo de las personas y del temor de contagio de la ciudadanía.
Muchos organismos sostienen una estimación en línea con la del Gobierno, pero otros, como el Fondo Monetario Internacional (FMI), por ejemplo, esperan un desenlace económico mucho peor (-5% del PIB).
El déficit fiscal previsto para este año por el Ministerio de Hacienda sigue anclado en 6%, pese al anuncio de un plan de reactivación económica con un nuevo paquete de endeudamiento, aparte de los USD 1.600 millones asumidos y ya gastados en casi el 100% para contener la pandemia y sus efectos.
El plan de reactivación contempla un monto de USD 2.513 millones, de los cuales, USD 350 millones de deuda pública asumirá el Tesoro para financiar el pago de deuda al IPS, capitalizar el fondo de garantías y al CAH, financiar obras públicas, el Pytyvõ 2.0 y construcción de viviendas.