Solo Carlos Alcaraz –convertido a sus 19 años en el más joven Nº 1 de la historia de la ATP (desde 1973) después de su título en el US Open en setiembre– se pierde la cita a causa de una lesión en los abdominales sufrida en el Masters 1000 de París.
La ausencia de Alcaraz abre una pequeña puerta para que Rafael Nadal (2º) o Stefanos Tsitsipas (3º) puedan acabar el año en el número 1 mundial. El griego de 24 años, que ocupa la mejor clasificación de su carrera, debe ganar la competición sin perder ni un solo partido.
El español regresaría al Nº 1 con 36 años si conquista un torneo que nunca ha ganado o si permanece invicto hasta la final, a condición de no perderla ante un Tsitsipas que llegaría invicto. Si no se produce ninguno de los dos escenarios, Alcaraz terminará el año como Nº 1 del mundo.