El técnico del Ministerio de Agricultura y Ganadería Julio Gallardo explicó que este año la superficie de frutilla creció en un 30% y se extiende en alrededor de 100 hectáreas, solo en Areguá. Otra particularidad es que la cosecha arranca dos semanas antes que el 2020, dando una ventaja más para su comercialización.
Por su parte, Raquel Gómez, de la Asociación de Productores de Frutilla de Areguá, recordó que las excelentes proyecciones de producción de 60.000 toneladas son el resultado de un trabajo de un año y medio con la incorporación de tecnología y mejoras en el manejo de los cultivos.
En cuanto a las variedades con mayor salida, mencionó que Dover y Sweet Charlie se imponen en el mercado, pero anunció que en julio plantarán por primera vez la variedad “de todo tiempo” denominada Santa Andrea, proveniente de Itapúa.
Los productores esperan que esta frutilla les permitirá extender la campaña agrícola hasta febrero del 2022, lo que les genera aún más entusiasmo.
