23 dic. 2025

Arabia Saudí usa el comercio de armas como diplomacia

Niega. Alemania no entregará este buque a la guardia  de Arabia por muerte de Khashoggi.

Niega. Alemania no entregará este buque a la guardia de Arabia por muerte de Khashoggi.

EFE-AFP

EL CAIRO - EGIPTO

La muerte del periodista saudí Jamal Khashoggi está abriendo debates hasta hace poco inimaginables como el de la venta de armas a Arabia Saudí, un lucrativo negocio que ha engullido durante décadas las denuncias de las oenegés sobre las violaciones de los derechos humanos en el reino.

Ahora con el escándalo del asesinato de Jamal Khashoggi, el reino Saudí se libra de posibles sanciones y condenas gracias al gran volumen de compra de armas

Si bien Alemania ya anunció que no venderá armamento a Arabia Saudí; en Francia, el presidente Emmanuel Macron guarda silencio. El Gobierno español condenó el “terrible” asesinato del periodista Jamal Khashoggi, pero defendió mantener los contratos ya suscritos de venta de armas a Arabia Saudí.

El presidente Donald Trump reiteró que no se inclina por dejar de vender armas a Riad porque “Rusia, China y Francia se aprovecharían rápidamente”. La compra de armamento de EEUU es por valor de USD 110.000 millones, pero entre otras compras, las adquisiciones del reino en EEUU llegan a USD 450.000 millones.

El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, también se resiste a rescindir el contrato de venta de vehículos blindados a Arabia Saudita, cuyo monto asciende a unos USD 11.000 millones.

Arabia Saudí mantiene una guerra abierta en el Yemen, donde encabeza la denominada coalición que interviene en el país desde marzo de 2015. No es la única vez que el reino intervino fuera de sus fronteras. Cuando la primavera árabe estalló en el 2011, tropas saudíes ayudaron a sofocar los levantamientos civiles en Yemen y en Baréin. Además, mantiene un bloqueo contra Catar desde el año pasado.

Desde hace más de 40 años la región asume que Arabia Saudí e Irán, suníes y chiíes, mantienen una guerra fría por la supremacía regional.

Pero la compra de armamento va más allá de la búsqueda de una capacidad militar real y también responde a una estrategia de diplomacia a través de la industria militar.

“Indudablemente, el nivel de compras de armas de Arabia Saudí aumenta el rechazo de sus aliados en Occidente a comprometer su relación bilateral”, indicó Timothy Kaldas, del Instituto Tahrir para Oriente Medio.

“Los países del Golfo conscientemente persiguieron esa estrategia durante mucho tiempo, durante mucho tiempo compraron sistemas de defensa que no tenían previsto usar necesariamente para conseguir influencia y apoyo e incrementar la percepción del valor de su relación con EEUU, Reino Unido, etcétera”, agregó.

Arabia Saudí tiene previsto gastar este año alrededor de 56.000 millones de dólares en Defensa.