De acuerdo a los datos recabados, los imputados presentaron una fianza de G. 700 y G. 900 millones.
Llamativamente se da esta disposición, siendo que tanto Ocampos como Medina habían confirmado en su declaración ante la Fiscalía que ellos habían contactado con Bernardo Arellano, el sindicado como principal gestor de estos documentos adulterados.
Sebastián Medida e Iván Ocampos fueron imputados por producción mediata de documentos públicos de contenido falso, uso de documentos públicos de contenido falso y asociación criminal y los fiscales Osmar Legal, Marcelo Pecci y Federico Delfino solicitaron prisión preventiva.
Iván se ofreció a ayudar a Dalia López en el trámite de documentos paraguayos para el ex futbolista, su hermano, representante y esposa de este. Junto con Sebastián, supuestamente contactaron con Arellano.
Si bien ante los fiscales revelaron que ellos consiguieron el contacto, alegaron haber sido engañados por Arellano y pusieron a conocimiento del entonces director de Migraciones, Alexis Penayo, quien se comprometió a dar solución.
¿Ocultan a Dalia?
Hoy la principal implicada en el presunto esquema criminal de documentos de contenido falso, Dalia López, continúa prófuga y no hay indicios de que se presente ante la Justicia, ya que había mencionado que era vulnerable al Covid-19.
Se maneja que ella estaría involucrada en una asociación ligada al lavado de dinero y que estaría siendo protegida.