Sin embargo, a medida que desarrolló el partido quedó claro que General Díaz iba a pelear cada balón como si fuera el último. Las acciones hicieron que el espectáculo creciera con los minutos que pasaban. Fue el experimentado Jorge Achucarro el que tuvo una buena situación, pero definió mal.
Mientras que Néstor Camacho incluso dejó por el camino al portero de las Águilas, Bernardo Medina, pero al final no pudo concluir la jugada con comodidad.
EMOTIVO. Lo mejor estuvo en la última parte del enfrentamiento. Es que los dos equipos tenían como objetivo sumar los tres puntos en disputa. Y fue General Díaz el que se puso al frente del marcador con un golazo de Achucarro, quien recibió un centro preciso de Roberto Bonet y definió con clase la jugada. Esta situación hizo que Guaraní se desordenara, por el nerviosismo. Incluso hubo muchas imprecisiones en el traslado del balón.
El técnico Daniel Garnero, de Guaraní, tuvo que recurrir al volante Alberto Contrera para buscar nuevamente la dinámica. Y fue Contrera en el primer centro que envió para la definición precisa de un cabezazo de Juan Aguilar, quien así igualó el marcador.
Guaraní marcó la pauta, más que nunca sacó ventaja de ese monopolio dentro del campo. General Díaz peleó en todos los sectores y lo hizo con solvencia y con mucho orden. Alberto Contrera envió un córner y con la complicidad del portero Medina el esférico se metió adentro.
Con el resultado de anoche, el Legendario acaricia el título del Clausura. Ganando a Luqueño será campeón.