En cuanto al desarrollo sostenible, la funcionaria mencionó que una explotación forestal brinda, como mano de obra directa 0,35 jornales por hectárea, e indirectamente 3,5 jornales por hectárea, en un tiempo de 10 a 12 años, que es cuando se percibe el retorno de la inversión.
“Una hectárea de eucalipto captura, además, 8,8 toneladas de carbono por hectárea y si la inversión inicial es, por ejemplo, de USD 2.500, el ingreso a los 10/12 años será de USD 12.500 por hectárea”, especificó.
Producción forestal. Oportunidades de negocios se tituló el evento, donde también participaron Mario Romero Lévera, director nacional de Rediex, y Raúl Legal Duarte, presidente de la Federación Paraguaya de Madereros (Fepama)
Justamente, este último mencionó que el fenómeno producido por la pandemia es que se incrementó en un 80% la producción forestal para el mercado interno, respecto de lo acontecido el año pasado, especialmente en los departamentos de Caaguazú, Coronel Oviedo e Itapúa.
EFECTO COVID. Ciertamente, a criterio del titular de Fepama, el mercado internacional está resentido por los efectos del coronavirus, pero manifestó confiar en que habrá recuperación cuando pasen las restricciones al comercio internacional. “Estamos haciendo stock, porque se habla de la madera como un producto del crecimiento en la demanda internacional; estamos optimistas”, subrayó.
Goralewski recordó, finalmente, que se obtuvieron como divisas USD 102 millones en 2019 por productos forestales, lo que representa el envío de más de 135.000 toneladas, principalmente de carbón y briquetas (75,21%), madera terciada (7,1%) y madera aserrada (5,53%), entre los principales.
En cuanto a la capacidad instalada en el país, dijo que es de 865.392 m3/año, con un 60% de especies exóticas y el resto conformado por especies nativas; con 326 aserraderos/industrias que se dedican al procesamiento.
