La V Azulada le copó la cancha a Trinidense, lo desbordó constantemente y, por sobre todo, abrió las líneas, con esto las conexiones del equipo de Arrúa no funcionaban y el juego colectivo era casi impracticable.
Rápidamente Ameliano tuvo su chance de adelantarse, pero Gavilán le paró un penal a Doldán y quedó el marcador en cero.
De todas formas, se notaba que era el partido de Ameliano, ante la quietud de la defensa trinidense, Luis Ortiz adelantó a los de Barrio Jara.
Parecía injusto, pero en un descuido, Nicolás Maná emparejaba el marcador, sin que los de Trinidad hagan mucho en ataque.
Ya sobre el final, el juvenil Torales pudo aprovechar una de las últimas jugadas para que Ameliano gane 2-1, su segunda victoria consecutiva del torneo y dejando toda la preocupación a Trinidense, que encadenó su segunda caída en fila, pinchándose la buena imagen que dio en las primeras fechas.
1,137
puntos de promedio alcanza Ameliano; le saca de momento cinco puntos de ventaja a Resistencia (58 a 53).