La operación concluyó con 4 delincuentes presos, 6 delincuentes muertos y 6 pistolas, una granada, automóviles y drogas aprehendidos, informó la Policía Militarizada del Estado de Río de Janeiro.
Los hechos ocurrieron en la región conocida como Chapadão, un conjunto de favelas situado en la zona norte de Río de Janeiro, y de acuerdo a testimonios recogidos por la prensa, comenzó a la madrugada, cuando los agentes irrumpieron en una fiesta que era realizada en medio de una plaza. El mayor Iván Blaz, portavoz de la Policía Militarizada, admitió que los enfrentamientos comenzaron en medio de esa fiesta, en la que estaban algunos delincuentes buscados, que confrontaron a las autoridades, lo cual motivó la necesidad de una intervención.
De acuerdo a la Policía, la zona donde ocurrieron los hechos es dominada por el Comando Vermelho, una organización ilegal dedicada al tráfico de drogas a la que se han aliado algunas bandas volcadas a asaltar camiones con diversos tipos de mercaderías.
La violencia de la Policía en Río, denunciada por grupos de derechos humanos, preocupa hasta a la Corte Suprema de Brasil, que emplazó a las autoridades de ese estado a presentar un plan para reducir las muertes y los abusos en sus operaciones.
Según estadísticas oficiales, los policías responden por casi la cuarta parte de los homicidios registrados en Río de Janeiro. El año pasado, el total de homicidios en ese estado cayó 8%, desde 3.544 en 2020 hasta 3.245 en 2021, mientras que las muertes de civiles a manos de policías subieron 12% y sumaron 1.298.