El costo del alquiler y la situación crítica como consecuencia de la pandemia de Covid-19 generaron el cóctel ideal para llegar a los menores ingresos de esta empresa, que lleva en el mercado 67 años, brindando un servicio de menú peculiar y casero.
Sigrid Forster, gerente general operativo del Lido Bar, replicó en los medios que en realidad no hay deseos de cerrar el negocio, pero dejó abierta la posibilidad de una eventual mudanza, debido a que los dueños del edificio donde opera el local gastronómico mantienen un precio de alquiler que ya no puede ser costeado.
menos ventas. La referente explicó que las ventas cayeron ostensiblemente en los últimos meses, porque de 45 butacas que estaban disponibles y se llenaban con clientela, solo se puede llegar ahora a 7 nada más, y que la cantidad de mesas de afuera se redujeron.
El local había llegado a una situación en que los dueños originales concretaron una transacción con 7 ex trabajadores, quienes se quedaron con el negocio, luego de la cesión de acciones de un matrimonio de apellido Schulz.
Posterior a la reapertura del local luego del confinamiento estricto por la pandemia) las ventas apenas llegan a la mitad de lo que constituían normalmente antes de la pandemia; mientras que el personal se redujo en un 20%.
Publicaciones de ayer hicieron mención a que el monto del alquiler oscila entre los G. 90 millones y G. 100 millones; mientras que existen negociaciones entre los dueños del edificio y los directivos de Lido Bar, según confirmó la representante de este local gastronómico.
