La analista de Políticas Públicas y Derechos Humanos de Tedic, Paloma Lara Castro, recordó que, ya durante la discusión del proyecto de ley, la organización no gubernamental advertía de estos peligros, así como otros referentes del mundo de la informática, incluso de otros países, señalando las experiencias ya atravesadas en el mundo respecto a este tema.
Aseguró que, como en otros países se implementa, el desbloqueo de listas o voto preferencial se puede realizar perfectamente sin la urna electrónica o máquina de votación, y que si se quiere utilizar tecnología para ello, puede aplicarse en el momento del escrutinio y no durante el voto, ya que lo importante es proteger el secreto del voto y la fiabilidad de los resultados.
“Nosotros seguimos diciendo que esto puede afectar a la democracia, ya que puede afectar el secreto del voto, y lo que presentan estas máquinas es la posibilidad de traceo del voto ciudadano, es una caja negra que no sabemos cómo funciona entre el votante y su expresión del voto, entonces eso es sumamente peligroso, de hecho en Alemania se declaró inconstitucional por eso”, señaló.
VULNERABILIDAD. Señaló que la importancia de la transparencia es importante en el proceso electoral, y que dejar eso a una élite de tecnólogos es peligroso.
“Estamos siguiendo de cerca el proceso de licitación y por supuesto que vamos a ver qué tipo de máquinas van a ser las que vamos a utilizar, pero independientemente a ello, existen estos peligros latentes”, manifestó.
Respecto a lo que señalan los técnicos de la Justicia Electoral, de que las máquinas de votación no van a estar en línea ni ligadas al padrón, señaló que igualmente hay peligro.
“Hay que partir de la base de que ninguna máquina es infalible, todos los sistemas son vulnerables, todos han sido hackeados, hay que ser responsables en comunicar la información, no podemos decir que el sistema va a ser infalible, ninguno lo es. Es un tema que se ha hablado e implementado en el mundo y la experiencia mostró que no sirve, Venezuela es el único que sigue y es cuestionado, otros aplican pero parcialmente”, dijo.
Señaló que se puede invertir y aplicar tecnología en el proceso electoral pero no el acto del voto, sino en otros aspectos que ayuden y no compliquen el proceso y al elector mismo que tiene poco acceso a la tecnología.
“Hay que ver cómo va a ser la experiencia paraguaya, pero la experiencia en el mundo es negativa”, sentenció.