Resalta que “no hay una sola academia diplomática que no dependa exclusivamente de su Ministerio de Relaciones Exteriores”.
A la institución le compete la formación profesional en la diplomacia y en las cuestiones consulares. Es la que organiza los cursos de formación, perfeccionamiento y actualización. “Quienes ingresan por concurso de oposición y méritos reciben dos años de formación en la Academia, en calidad de terceros secretarios dentro del escalafón diplomático”. En el país, desde el 2007 se vienen realizando los concursos de oposición, como única vía para ingresar a la carrera. En total, ingresaron 144 personas. A los ingresantes se les asigna un salario de G. 8.800.000 para dedicarse exclusivamente a los estudios. “Es así en todas las academias diplomáticas. En nuestro caso, los fines de semana tienen que leer, preparar trabajos académicos. de investigación y escritura. No son solo 8 horas en la Academia”, resalta.
Concluida esta primera etapa, realizan pasantías rotatorias en distintas dependencias del MRE.
Para Lilian Samaniego, la Academia Diplomática debería tener el reconocimiento del MEC “al igual que lo tienen las Fuerzas Armadas y las Fuerzas Policiales”.
La misma senadora también dice que el concurso de oposición no es transparente, Cardozo resalta que al inscribirse los postulantes se le asigna un código para presentarse en los exámenes. “Ningún profesor puede saber los nombres de los que se presentan a rendir” y en la corrección de los exámenes que son conforme al método de selección múltiple, está a cargo de la Facultad de Politécnica de la UNA.