De 4 a 7 am, las camionetas de Chipa Barrero estacionadas en lugares estratégicos de entrada y salida de Asunción ofrecen su producto. Más tarde, ya empiezan a recorrer Asunción y Gran Asunción.
Hombres jóvenes son quienes se encargan de la conducción y venta de las chipas. Este sistema es utilizado por varias chiperías, pero se reconoce como uno de los pioneros a Juan Ramón Ayala, quien hace 56 años se dedica a este rubro. Él llegaba a Asunción en ómnibus con sus canastos y los pasajeros se quejaban del olor que inundaba el espacio, hasta que, tras conocer su historia, el dictador Alfredo Stroessner le financió la adquisición de su primer vehículo de distribución.