“Estamos en el 72 día de guerra y por ahora no vemos su final. Tampoco sentimos ni vemos ningún deseo por parte rusa para su cese”, afirmó.
Según el Estado Mayor General ucraniano, los combates continúan por tercer día consecutivo en los alrededores de la planta metalúrgica, donde se refugiaría un número indeterminado de combatientes del batallón nacionalista Azov.
La escalada coincide con la tercera fase de la operación conjunta de evacuación de civiles a manos de la ONU y el Comité Internacional de la Cruz Roja, que han rescatado a “casi 500 personas de Azovstal, Mariúpol y alrededores”.
Rusia mantiene que no ha iniciado el asalto de la planta, suspendido indefinidamente por el Kremlin, y se limita a atacar las posiciones de los combatientes ucranianos que intentan ganar terreno aprovechando la evacuación de civiles.
La Presidencia ucraniana informó del inicio del rescate el viernes de los últimos civiles de la planta. “Ucrania continuará haciendo lo posible para salvar a todos los civiles y militares”, señaló Andriy Yermak, jefe de la administración presidencial ucraniana
El batallón Azov acusó a las fuerzas rusas de alcanzar con un misil antitanque un automóvil supuestamente designado para la evacuación.
“Como resultado del ataque, un combatiente murió y seis resultaron heridos. El enemigo continúa violando todos los acuerdos y no garantiza la seguridad durante la evacuación de la población civil”, señala el comunicado castrense.
Mientras, medios rusos informaron sobre la evacuación en dos autobuses de 25 civiles, incluido niños, que habían sido presuntamente retenidos por la fuerza en las catacumbas de la acería.
DECLARACIÓN DE GUERRA. El Gobierno ucraniano denunció que Rusia tiene planes de declarar la guerra a Ucrania el 9 de mayo, coincidiendo con el Día de la Victoria sobre la Alemania nazi.
“Según los datos de los servicios secretos de nuestros socios, Rusia alberga esos planes. Declarar una guerra total el 9 de mayo (...). En cualquier caso, seguiremos luchando hasta la victoria final sobre el ocupante y agresor”, dijo Denys Shmygal, primer ministro ucraniano. Dicha posibilidad, que ya había sido descartada por ser un “disparate” por el Kremlin, incluiría la movilización general de la población masculina.