19 abr. 2024

Una escuela inclusiva es más que instalar una rampa, advierte experto

Suele considerarse en el país que una escuela es inclusiva solamente por su infraestructura. Esta acepción es utilizada por las mismas autoridades, cuando hablan de “instituciones educativas inclusivas”, si las construcciones incluyen rampas o sanitario dirigidos a los estudiantes con discapacidad física.

¿Inclusión?  Un acceso para alumnos con discapacidad construido en una escuela pública.

¿Inclusión? Un acceso para alumnos con discapacidad construido en una escuela pública.

En este sentido, el profesor Ignacio Nacho Calderón, doctor en Pedagogía por la Universidad de Málaga, advierte que esta visión es “muy reduccionista y falaz” pensando en la educación inclusiva.

El experto disertará en el país los próximos 18 y 19 de setiembre en el Programa de Promoción de Educación Inclusiva de las Américas, que organiza Fundación Teletón.

Calderón es un reconocido académico en el sector. Autor de cuatro libros que tratan temas como la exclusión en la educación, promueve que la inclusión no es solo la obligatoriedad de inscribir a los niños con discapacidad en las escuelas, además implica un cambio de cultura escolar.

“Aquellas personas han sido excluidas de ella (la escuela) hasta tal punto que cuesta pensar que tienen un idéntico derecho a ejercer la ciudadanía desde la infancia, aprendiendo y participando junto al resto de compañeros”, expresa.

Participación. Uno de los aspectos fundamentales para afrontar la exclusión de las personas con discapacidad es darles participación en las discusiones sobre el tema, tanto en programas como en los mismos establecimientos.

“Las personas denominadas por su discapacidad en general son objeto de las decisiones que otras personas toman por ellas, pero esto debe ser revertido con la participación de los alumnos segregados”, agrega el español.

Por supuesto, otro pilar fundamental para mejorar la inclusión es la inversión. Es necesaria la formación continua de los docentes, orientadores y otros expertos relacionados con el ámbito escolar.

“Se requiere de más inversión en personal docente y en su formación, en vuestro país y en el mío. Esto supone que necesitamos unirnos para reclamar una mayor valoración de la educación pública dentro de los presupuestos nacionales”, sostiene el educador.

Por otro lado, Calderón indica que si bien no hay inversiones suficientes, hay docentes valiosos siempre. Asimismo hay formación hecha y acciones colectivas que se emprenden en la región y en Europa, con el fin de lograr un sistema educativo para todas las personas.

Evento. Sofía Barranco, de la Fundación Teletón Paraguay, comenta que el Programa de Promoción de Educación Inclusiva de las Américas propone en el país establecer prácticas y compartir experiencias para mejorar la inclusión en el ámbito escolar.

Luego la comunidad educativa podrá acercar estas experiencias a sus escuelas para ponerlas en práctica. “Vamos a escuchar experiencias de expertos internacionales, pero también nacionales sobre la educación y la inclusión”

El evento que se realizará el 18 y 19 de setiembre es de acceso gratuito, pero los cupos son limitados. Más datos al (021) 552-300.


MEC registra 12.000 alumnos con discapacidad
Con el Registro Único del Estudiante (RUE) se logró cuantificar este año a 12.000 alumnos con discapacidad en el sistema educativo paraguayo, según datos de la Dirección General de Educación Inclusiva del MEC.
El director general de este estamento, César Martínez, asegura que a través de esta cifra mejorarán las políticas públicas hacia la inclusión. “Este año entregamos 500 kits para chicos con discapacidad visual, pero mediante el RUE podemos indicar que esto no es suficiente, ya nos permite pedir una ampliación del presupuesto para asignar más recursos al sector”, dice.
Martínez admite que hay demasiadas falencias todavía para el sector, pero que antes ni siquiera tenían datos precisos para tomar acción.
“Si reconocemos que en una zona específica o institución educativa hay varios chicos, podremos asignar más profesionales como orientadores”, relata. Explica que el RUE permite la confidencialidad de los datos de cada estudiante, por lo que no tienen en cuenta si Juan Pérez, con nombre y apellido, tiene alguna discapacidad, pero saben que hay un chico en tal escuela. En cuanto a capacitación, este lunes se inicia un curso sobre inclusión, dirigido a docentes de todo el país.