“Recuerdo que en la guerra, lo primero que los padres decían al cumplir los 16 y 17 años; tienes que irte, porque aquí corres peligro”, manifestó a Efe Elvis Valle, que llegó a EE.UU. en 1988.
“Preferimos tener un hijo lejos a un hijo muerto y es lo mismo que está aconteciendo hoy en día”, explicó acerca de la creciente llegada a EE.UU. de menores que son enviados por sus familiares desde Centroamérica sin compañía.
Valle se encuentra trabajando en la versión en español de su libro “The Big Cave”, lanzado el pasado abril por la editorial Dorrance Publishing y disponible en internet. “La gran cueva”, en español, llegará a las librerías de EE.UU. en septiembre.
La obra es un relato de la niñez del escritor combinada con las experiencias de un primo, relatadas a través de un personaje llamado Fredy, quien para no ser asesinado por los soldados se esconde en una cueva y después emigra a Estados Unidos.
“Este país es como una gran cueva, donde muchos inmigrantes llegamos con la esperanza de regresar pronto a nuestro país; pero esta cueva ya no nos deja salir”, aseguró Valle.
“Personas como yo que tuvimos que salir huyendo para salvar nuestra vida a la edad de 17 años tuvimos la suerte y la fortuna de conservar la vida. Sin embargo, muchos compañeros amigos nuestros no corrieron con la misma suerte”, señaló.
Valle tramitó la ciudadanía estadounidense después de obtener asilo político debido a que los paramilitares de la defensa civil en su natal Santa Rosa Guachipilín, en la provincia de Santa Ana, le buscaron para hacer guardia armada.
El periodista afirmó que la “presión para un niño es presión y no importa de donde venga”, ya sea del ejército o la guerrilla que en esa época obligaban a los niños a servirles, o de las pandillas que hoy en día “obligan a los niños a integrarse a sus filas para delinquir”.
Valle, un profesional de la radiodifusión en español, se inició en 1995 como locutor después de graduarse como técnico en comunicaciones de la “American Communications Institute” en Hollywood, California.
Su experiencia como animador y director de programación en empresas líderes de radio le motivó a escribir el libro “La gran Cueva”.
El escritor recordó algunos momentos de su infancia que lo marcaron, como aquella mañana siguiente a un ataque de la guerrilla cuando salió a comprar pan. Tenía 11 años.
“A lo lejos vi que una persona (que) quizás estaba borracha durmiendo en la calle; pero cuando me acerqué vi que tenía el cráneo destrozado a balazos y sentí miedo”, dijo.
Valle argumenta que a esas escenas están expuestos a diario los menores en países con altos índices de violencia como El Salvador, Honduras y Guatemala.
“Mi niñez fue interrumpida por la guerra en El Salvador, porque a los 16 años en que fui obligado a servir a la defensa civil, comencé a saber más de fusiles y granadas que de juguetes”, declaró.
“El fusil que me daban era más grande que yo y si uno no se presentaba a hacer guardia tenía que pagar para contratar a alguien que cubriera el puesto”, recordó.
Valle aseveró que los niños a esa edad no deben de andar pensando en la posibilidad de dispararle a otra persona, sino que deben centrar sus mentes en estudiar, divertirse y jugar.
La llegada de menores a la frontera, la mayoría procedentes de Centroamérica, ha superado los 57.000 en los últimos diez meses y se estima que podría alcanzar los 100.000 menores a finales de año.