Una gran caravana acompañó el último adiós del ídolo albirrojo, Roberto Cabañas, quien falleció en la madrugada del lunes 9 de enero, a los 55 años.
Tras una breve misa en la antigua basílica de la Virgen del Pilar, se dio inicio al recorrido del cortejo fúnebre.
Los vehículos, principalmente motos, y la carroza que transportaba el cuerpo de Cabañas tomaron rumbo a la Municipalidad, lugar donde se realizó un acto de reconocimiento póstumo para “La Pantera”.
Allí la familia del exfutbolista recibió la adjudicación del nuevo nombre de la calle Cristobal Colón, que a partir de ahora pasa a llamarse “Roberto Cabañas”, al igual que el polideportivo de la ciudad.
Posteriormente el recorrido siguió por otros lugares considerados importantes en la infacia del hijo dilecto de Pilar, pasando por el club Capitán Bado -institución deportiva que lo vio nacer-, donde excompañeros y dirigentes que llegaron exclusivamente para la ocasión brindaron algunas palabras de despedida.
El emotivo recorrido tuvo su momento más álgido en el cementerio de la localidad ubicada a 358 kilómetros de Asunción, con la despedida de “El Mago” que dejó fisícamente el mundo terrenal para pasar a convertirse en leyenda.