Tanto las defensas como la querella adhesiva habían apelado el fallo dictado 2 de marzo de este año por el Tribunal de Sentencia integrado por las juezas Sonia Villalba, Elsa García y el juez Digno Arnaldo Fleitas. El fallo confirmatorio fue dictado en forma unánime por los camaristas Bibiana Benítez, Gustavo Ocampos y Bibiana Benítez Faría.
En el caso se juzgó a los responsables por la muerte a golpes del joven Rodrigo Enriquez, ocurrida el 8 de mayo de 2011 en las cercanías del Cementerio de la Recoleta.
Fueron hallados culpables en calidad de autores Escobar y Riveros, mientras que Vargas fue condenado como coautor de los hechos.
La defensa planteó la errónea aplicación del derecho, de la violación del principio de congruencia, contradicción en la sentencia y violación de las reglas de valoración probatoria. Los defensores hablan de que no hubo dolo (intención) de matar, y que la sentencia fue infundada, a más de la violación del derecho a la defensa.
Mientras, la querella adhesiva, por su parte, solicitó que la pena sea elevada a 10 años de encierro.
La fiscala Ariela Chaparro solicitó la confirmación de la sentencia condenatoria.
Al analizar los fundamentos del fallo, los camaristas apuntaron que la sentencia tiene todos los fundamentos que hicieron que los jueces llegaran a una decisión.
Además, apuntan que se respetó el debido proceso y que el fallo tenía todos los requisitos para que sean ratificadas las penas. Con ello, por voto unánime, ratifican la resolución del juicio oral.