EFE
“Ya se puede decir que la reunión se centrará en los ataques con misiles perpetrados esta madrugada por EEUU contra Siria”, dijo a los periodistas el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Denunció que el ataque lanzado en represalia por el presunto uso de armas químicas contra civiles solo beneficia a las organizaciones yihadistas que actúan en territorio sirio.
“No sabemos qué objetivos se propuso Washington al tomar la decisión sobre esos ataques. Pero es un hecho indiscutible que los ataques se han realizado en beneficio del Estado Islámico (EI), el Frente al Nusra y otras organizaciones terroristas”, subrayó.
Las fuerzas armadas rusas, agregó, seguirán prestando apoyo al Ejército del régimen sirio “para ayudarles en su lucha con los terroristas”.
Peskov recordó que durante su campaña electoral, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, “declaró la lucha contra el terrorismo internacional y el EI como su prioridad y defendió la formación de una coalición internacional en toda regla”.
“Lo que sucedió es todo lo contrario. Veremos cómo se desarrolla la situación, pero ya podemos decir que esos ataques perjudicaron la lucha contra el terrorismo”, apuntó.
Mientras, el Ministerio de Defensa ruso informó de que en el ataque contra la base aérea siria de Shayrat murieron cuatro militares sirios y desaparecieron otros dos.
Además, según datos de la cartera rusa, menos de la mitad de los 59 misiles lanzados por la Armada estadounidense alcanzaron su objetivo.
“Según datos de seguimiento, sólo 23 misiles llegaron hasta la base siria. No se sabe dónde cayeron los 36 misiles restantes”, explicó el portavoz del ministerio, el general Ígor Konáshenkov.
Ataque de EEUU contra base siria recuerda a invasión de Irak
El ataque con misiles lanzado por Estados Unidos contra una base aérea siria sin autorización de la ONU recuerda a la invasión de Irak de 2003, según el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
“Esto recuerda a la situación de 2003 cuando Estados Unidos y el Reino Unido, con sus aliados, invadieron Irak sin autorización del Consejo de Seguridad”, señaló Lavrov desde Taskent, la capital de Uzbekistán.
“Pueden decir lo que quieran, pero el ataque, desde luego, es más que palabras”, añadió.