06 may. 2025

Por tercera vez se frustra intento de intervención en Facultad de Ingeniería

Las autoridades de la UNA siguen “entrampadas” sin poder resolver el conflicto en esa casa de estudios. Alumnos descartan dialogar con el decano Éver Cabrera; piden su renuncia o que se intervenga la Fiuna.

A la calle.  Casi un centenar de universitarios  sacaron los pupitres a la Avda.  Mcal. López para exigir la renuncia del decano.

A la calle. Casi un centenar de universitarios sacaron los pupitres a la Avda. Mcal. López para exigir la renuncia del decano.

La tercera no fue la vencida. Una minoría del Consejo Superior Universitario (CSU) se opuso de nuevo a que se intervenga la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Asunción (Fiuna), que ya lleva 109 días de paro estudiantil. Pese a que una mayoría –de 30 contra 12– votó ayer a favor de la medida, que se supone reencauzará la actividad académica en esa casa de estudios, no se alcanzaron los dos tercios necesarios para disponer la intervención.

Trampita. Parafraseando a la senadora Blanca Ovelar, los miembros del CSU están “entrampados” en una cláusula legal que les condiciona a reunir 34 votos de un total de 50 integrantes, aún inexistentes.

Ayer estaban en la sesión extraordinaria 45 consejeros; antes de votar, se propuso al pleno que la misma se haga sobre el total de los presentes en el recinto. Así, los dos tercios serían sobre la base de 30 y no de 34 miembros. Esa propuesta, formulada por Ricardo Meyer, decano de Arquitectura, perdió por 29 contra 16 votos, a mano alzada.

Lo paradójico fue que, tras la votación por intervenir o no la Fiuna –que se hizo de forma secreta–, se impuso por 30 a 12 (uno nulo y otro en blanco) el “sí" a la intervención, pero sin alcanzar la cantidad necesaria.

Por lo que, si se votaba sobre el total de los presentes, iban a llegar ese mínimo requerido.

Sin consenso. Los doce decanos de la UNA, antes de que se frustre por tercera vez la intervención, intentaron consensuar una salida a la crisis en la Facultad de Ingeniería. El rector Abel Bernal llamó a un cuarto intermedio para reunirse, en una sala contigua del Rectorado, por espacio de una hora. La idea era evitar volver a votar sobre lo mismo. En la antesala a la cita de ayer, una alternativa que sobrevolaba entre las autoridades era la de persuadir al decano Cabrera a que pida permiso y se tome unas vacaciones hasta que se calmen las aguas.

No hubo consenso. Cabrera se aferra al cargo. “La idea es no dejar precedentes; todos los decanos que estamos aquí fuimos elegidos bajo el mismo Estatuto; todos nos regimos por un reglamento electoral y por qué justamente el decano de Ingeniería tiene que ser diferente al resto”, refirió Cabrera al término de la reunión.

Pese a que se frustraron varios intentos de diálogo, insistirá en hablar con quienes piden su cabeza. “Conversando con los líderes estudiantiles y con los profesores que no coinciden con nuestra administración; podemos llegar a una solución. Ojalá pueda ser lo más rápido posible para que vuelva la normalidad en la facultad”, dijo al apuntar que de 2.500 alumnos de Fiuna solo 20% asiste hoy a clases.