Isaías Ramón Torres y Gisselle Eliana Millen Otto, condenados a 40 años de cárcel por el crimen de Agustín Emmanuel Bogado Quintana, presentan trastornos de sicopatía sádico-sexual, explica el sicólogo forense Eduardo Bieber.
La macabra conversación que tuvieron los asesinos del joven, vía mensaje de texto, fue crucial para determinar la autoría en el hecho como también el desorden de personalidad y sexualidad, según el profesional.
“Esa mezcla de locura pego. Riesgoso todo y cuando empezó a sangrar, me gusta la sangre”, escribió Gisselle a su cómplice. “La joven tendría el problema que se conoce como hematofilia, que es el placer al ver sangre. La fantasía en ella es fuerte”, explica Bieber.
El experto señala que el comportamiento que tienen ambos asesinos corresponde al rango más grave dentro de la criminología, las personas con estas características son altamente peligrosas y menos recuperables, porque mezclan homicidio, placer y lo sexual. Generalmente, se puede tratar pero cura no tienen, asegura. Se puede controlar si se detecta a tiempo, aunque en este caso señala el profesional que es difícil.
“Si andan sueltos, son candidatos seguros a asesinos seriales, representan un peligro para la sociedad”, expresa Bieber, al detallar los rasgos de los condenados por el homicidio a sangre fría de Bogado, quien fuera el novio de la ex modelo Jazmín Baranda.
La pareja fue descubierta por la Policía debido a que en poder de Torres hallaron el teléfono celular de la víctima, ultimada el 8 de febrero del 2014, en su vivienda ubicada en el barrio San Cristóbal, de Asunción.
La investigación concluyó que la pareja fue hasta la casa de Manuel Agustín Bogado para concretar un encuentro íntimo (trío sexual), según el condenado. Sin embargo, a golpes le ocasionaron la muerte al locutor y mientras este agonizaba, la pareja homicida disfrutaba del momento, según los reveladores mensajes de texto que se intercambiaron los responsables del hecho.
Luego de concretar el crimen, fueron a festejar a un motel la osada determinación que tomaron, comentaron en el juicio donde el tribunal les condenó por unanimidad a 30 años de prisión más 10 años de medida de seguridad, ya que entre las conversaciones señalaban que no se arrepentían de asesinar por placer al joven.
“Como nadie nos pilló con lo de Manu, podemos joderle a otro pelotudín más dentro de poco. Basta con planear todo”, escribió Gisselle a su cómplice, quien le mencionó que estaba ansioso, ya que deseaba que la mujer participe sin error en el crimen.
Opinión“Ya no deberían salir de la cárcel”
“Si es por mí, estas personas ya no deberían salir de la cárcel. Si existiera la cadena perpetua, ellos deberían ser condenados. Mataron sin razón a mi hermano y se burlaron de él”, comentó Emma Bogado, hermana de la víctima. “Estamos muy satisfechos por la condena, ellos en ningún momento se arrepintieron por lo que hicieron. Se burlaron de Dios, yo leí todos los mensajes y fue muy duro”, manifestó la joven en una entrevista con nuestro diario. “Fue muy difícil volver a recordar lo que pasó, leer los escritos me pesó, porque yo le encontré tendido y sin vida a mi hermano”, relató.
Emma Bogado, hermana.
“Captaron a la víctima a través de internet”
La fiscala Carla Rojas explicó que Isaías Ramón Torres y Gisselle Eliana Millen Otto, condenados a 40 años de cárcel por el crimen de Agustín Emmanuel Bogado Quintana, captaron a su víctima a través de internet.
Supuestamente, los presuntos homicidas ofrecían servicios sexuales utilizando una fotografía de Giselle, con el número de teléfono de Isaías como contacto, elementos que publicaban en línea.
La línea telefónica es la que finalmente aparece como vinculante entre víctima y victimario, de acuerdo a los datos de la pesquisa. Emma Bogado, hermana de la víctima, confirmó que los hallados culpables fueron los que buscaron insistentemente persuadir a Agustín, hasta concretar un encuentro.
La fiscala Rojas y el comisario César Silguero, jefe del departamento de Criminalística de la Policía, sostuvieron que hubo varios elementos que fueron vitales para esclarecer el crimen.
Uno de estos fue el ingreso de los asesinos, que no fue forzado, lo cual llamó la atención de los investigadores. Además, los rastros en el cuerpo de la víctima y su posición daban a entender de que participó en el homicidio más de una persona.
El celular de la víctima no se encontró en su poder. Fue hallado luego, sin el chip, en manos del asesino, quien utilizó el aparato con su nuevo número. Sin embargo, la telefonía celular permitió conocer la comunicación entre la víctima y victimario.
La pesquisa descubrió que en internet la pareja montaba los anuncios para ofrecer servicios sexuales, con el fin de captar alguna víctima.
Tras la condena dictada en la jornada del pasado lunes, revelaron que el modus operandi de los asesinos . Silguero manifestó que se trabajó finamente al levantar datos de la escena del crimen, para que los indicios lleven hasta los sindicados homicidas.