“Expresamos nuestra solidaridad y cercanía a los familiares de Félix Urbieta, así como a los familiares de Franz Wiebe Boschaman, Edelio Morínigo y Abraham Fehr, quienes siguen privados de su libertad y sometidos al arbitrio de sus secuestradores”, expresa el comunicado emitido este viernes por la CEP.
La Episcopal rechaza todos los hechos que atenten contra la libertad, la vida y la paz de las personas, lo que consideran dones de Dios, “bienes que la sociedad debe promover y defender”.
Exhortan a los católicos a realizar cadenas de oración y de solidaridad para pedir por la liberación de los hoy cautivos.
“A las personas o grupos responsables de estos secuestros exhortamos a que cesen en sus acciones y encaminen sus inquietudes por caminos de la paz”, solicitaron.
La CEP asegura que el secuestro de Urbieta golpea nuevamente la sociedad, afectando directamente a la seguridad de todas las familias de nuestro país.