Mediante una orden ejecutiva, Obama puso fin a una declaración de “emergencia nacional” emitida en 1997 que servía como base a las sanciones económicas a Birmania, después de relajar en los últimos años las restricciones a ese país y restaurar el mes pasado sus beneficios comerciales.
“He determinado que la situación que dio origen a la emergencia nacional (...) ha quedado significativamente alterada por los avances sustanciales de Birmania para promover la democracia, incluidas las históricas elecciones de noviembre de 2015", dijo Obama en una carta a los líderes del Congreso de EE.UU.