Las llamadas entre el gerente de la Tabacalera del Este (Tabesa), José Ortiz, y el entonces comandante de la Policía Críspulo Sotelo no fueron solo el día en que ocurrió el incendio del Congreso y luego el ataque a la sede del PLRA.
De acuerdo con nuevos datos revelados ayer, el empleado del presidente Horacio Cartes quien es el dueño de Tabesa, contactó con el entonces comandante de la Policía varias veces desde enero pasado. Con esto se confirma la injerencia de Ortiz en la Policía tal como lo venía denunciando desde el año pasado la senadora Desirée Masi, del PDP.
La información salió a luz tras el cruzamiento de llamadas entre Sotelo y Ortiz (ver cuadro), y allí revela que el ex comandante de la Policía se comunicó quince veces en enero de este año con el empresario tabacalero.
En febrero de este mismo año, la comunicación entre ambos mermó a nueve veces.
Y en marzo, hasta el día 27, hablaron cuatro veces. En total se comunicaron 28 veces antes del 31 de marzo y 1 de abril. Ese día de la quema del Congreso y la muerte de Rodrigo Quintana en el PLRA, Ortiz habló vía celular con Sotelo 16 veces.
Luego de las comunicaciones telefónicas entre los cercanos al presidente Cartes (incluido Ortiz) y el ex comandante de la Policía, este dio órdenes a sus subalternos para llevar a cabo el ataque a la sede del PLRA, según denunció el titular de este partido, Efraín Alegre.
Fiscalía. Ayer, los abogados del PLRA, Guillermo Duarte Cacavelos y Santiago Lovera Velázquez, presentaron una denuncia ante el Ministerio Público. El escrito fue desarrollado con base en los elementos con los que cuenta el fiscal de la causa, Hernán Galeano, donde se logra “determinar los motivos por los cuales dos fuerzas de la Policía llegaron en un operativo cerrojo al Directorio del PLRA”.
El documento destaca que, en la noche del ataque, el comandante Sotelo mantuvo 16 conversaciones telefónicas con el asesor de Cartes, Ortiz. Luego se dieron las comunicaciones con los subalternos que actuaron.
Del operativo, según el texto, participaron las altas autoridades policiales, entre ellos, el director de la Primera Zona Policial, Prudencio Burgos, quien dependía del director general de Orden y Seguridad, Pablo Cantero, quien en ese momento se encontraba reunido con Sotelo y el director de Apoyo Táctico, Enrique Isasi, en la comandancia. También el jefe de la Comisaría 3ª, Amado Cantero, como el comisario Zacarías Centurión, de acuerdo con lo que dice el escrito. Detalla que el suboficial Arnaldo Báez (imputado) estaba bajo la dirección del comisario Tomás Paredes Palma, subjefe de Investigación de Delitos