Pasado el ecuador del primer año de mandato y tras una semana marcada por el fallo adverso de la Corte Suprema que anuló parcialmente el tarifazo del gas ordenado por el Gobierno en abril, el mandatario retomó las visitas a argentinos anónimos en el municipio bonaerense de San Miguel, acompañado por la gobernadora de esa provincia (la más poblada de Argentina), María Eugenia Vidal.
“Tocando timbres en San Miguel para charlar con los vecinos”, compartió Macri en sus redes sociales, junto a imágenes en las que se le ve saludando a la gente.
El presidente incluso repartió facturas (pan) compradas en una panadería de la zona.
“Qué lindo, extrañaba esto”, comentó el mandatario durante el paseo, según se pudo ver en la retransmisión de la timbreada realizada a través de la cuenta oficial de Snapchat de la Presidencia argentina.
El jefe de Gabinete del Ejecutivo, Marcos Peña, y el ministro de Educación, Esteban Bullrich, repitieron el gesto en el municipio bonaerense de Almirante Brown y el titular de la cartera de Interior, Rogelio Frigerio, hizo lo propio en la provincia de Entre Ríos (este).
Junto a los políticos salieron también a la calle unos 25.000 voluntarios de Cambiemos. efe