Se presentaron 686 candidatos para apenas 50 lugares. Se trata de uno de los programas insignia del Gobierno, financiado con los Fondos de Excelencia y coordinado por Federico Mora. Pese a su relevancia, el presupuesto es todavía escaso, según admite el mismo coordinador.
Una reunión donde los postulantes pudieron realizar sus reclamos ante Mora se realizó ayer en el auditorio del Ministerio de Hacienda.
Quejas. Alegando falta de transparencia en cuanto al proceso de selección de estudiantes, los jóvenes exigieron una reevaluación completa de los más de 600.
Pero Mora apuntó que solamente revisarán los casos puntuales de alumnos que demuestren que debieron quedar en la pre selección.
“Tenemos una apertura total para revisar los procesos y aseguramos la transparencia en todas las adjudicaciones”, aseguró el coordinador.
La evaluación de postulantes a becas de posgrado se hace con investigadores independientes a Becal. “Dos investigadores que no saben quién es el otro se encargan de las evaluaciones. Incluso traemos investigadores de Argentina para esta oportunidad”, alegó Mora.
Casos. Una de las denuncias tiene que ver con los ránkings de las instituciones terciarias.
Alumnos alegan que a la hora de postular, Becal solo pedía la ubicación de la universidad a elección, no así la especialidad de posgrado.
Pero finalmente no solo se tuvo en cuenta el puesto general de una universidad, sino también la especialidad.
Así, una universidad ubicada en el puesto 145 del ránking, puede que a nivel de especialidades figure entre las mejores 50 del mundo.
“Para las que estén dentro de las 100 mejores que están dentro de la especialidad, igual hacemos la revisión de los puntajes teniendo en cuenta la especialidad, que es un punto a favor del estudiante”, aseguró el coordinador de Becal.
Mora comentó que pesan más los puntajes extra que lo obtienen docentes universitarios, publicaciones en revistas especializadas o postulantes en universidades asociadas.
