14 jun. 2025

Lo que hay en el más allá no es nada bueno

Así la vimos --- Línea mortal

Foto: UH Edicion Impresa

Foto: ÚH Edición Impresa

Sergio Cáceres Mercado

sergio209@lycos.com

Hay que decir que aquella primera versión dirigida en los 90 por Joel Schumacher, con estrellas como Julia Roberts, Kiefer Sutherland (que de vuelta aparece pero en otro papel) y Kevin Bacon, fue una innovadora propuesta en el campo de la ciencia ficción y el suspenso. El remake que acaba de estrenarse en nuestras salas no tiene aquella sutilidad en el manejo de la imagen del director y la calidad actoral, y aunque hace cambios en el guion (que son de esperarse) es buena dentro de sus limitaciones.

No hay cambios en la estructura central del guion. Estudiantes avanzados de medicina deciden matarse en situaciones médicas de control para a los pocos minutos ser revividos por sus colegas. El objetivo: saber qué hay más allá de la muerte. Dos décadas después los detalles fisiológicos están actualizados para esta nueva versión, pero en desmedro de ciertos diálogos en los que antes había algunas reflexiones éticas y filosóficas.

El elemento que se descubre luego de la muerte permanece similar y lo que ocurre con estos médicos que la han desafiado también, excepto por un detalle mnemotécnico que es casi un superpoder. Por supuesto, los recursos técnicos de hoy son aprovechados y el suspenso de los años 90 da paso ahora a algo que roza el género de terror. Pero esta fortaleza técnica no alcanza para balancear esa falta de contenido pensante que había en aquella de Schumacher. A cada rato un cierto temor y análisis moral y social sobre lo que significa sobrepasar ciertos límites aparecía en las discusiones de aquellos temerarios médicos. Estéticamente las imágenes escatológicas eran recurrentes (como aquel de Prometeo robando el fuego de los dioses), algo que en esta versión es obviada para dar paso a locaciones más frías. Estos flatliners son más superficiales, aunque es innegable que la motivación de Courtney (Ellen Page) para arrastrar a sus compañeros a explorar el más allá es totalmente comprensible; lo que otrora era curiosidad científica y existencial, ahora es más bien sentimental.

El elenco muestra ahora a tres doctoras y dos doctores, cuando en la más vieja solo una mujer era parte del equipo, lo que revela que nuestros tiempos de inclusión siempre son sensibles en el cine. Un remake que no llega a la calidad de su antecedente, pero que igual entretiene y logra más de un susto. Recomendable.

Calificación: *** (buena)