Sergio Noe
La Costanera de Asunción recibió en la tarde-noche de ayer a más de diez mil personas para el cierre de Los Ojos Rojos Tour, que llevó la banda Kchiporros a México y a distintos puntos del país.
Antes del plato fuerte, la música se impuso en la soleada y fría cita dominical ante una masa, entre los que se contaban adolescentes y jóvenes, que apreció la presentación de la agrupación Villagrán Bolaños.
Esta banda nacional propuso sus movidos temas de rock alternativo con toques de funk, pop y ritmos latinos durante una hora en un escenario de primer nivel.
El evento, bajo la producción del sello 4Kcho Records y Claro, también contó con cámaras y pantallas gigantes que registraron también los movimientos de la segunda banda invitada del evento, Pipa para Tabaco, que subió a escena conquistando al público con una buena dosis de reggae.
Ya cuando el sol declinaba y la oscuridad teñía el lugar, aumentaba también el número de asistentes que acudían a ver a los anfitriones del festival y a disfrutar de un momento de esparcimiento en la Costanera, algunos en compañía de la familia.
Con la luna en alto y tras una larga espera, Kchiporros entró a escena y encendió la furia con “La lamparita” en la voz de un Chirola, que entró vestido de negro de punta a punta. La fiesta y la algarabía siguieron con “Señor Pombero”, “Cada día”, “Sistema solar”, “Ruta 1 y ruta 2" y otros de la mano de Chirola y su grupo, quienes movieron e hicieron cantar a los jóvenes sus éxitos.
El predio de la Costanera donde actuó la banda estuvo cercado y mucha gente quedó afuera, sin ver de cerca a los Kchiporros. Sin embargo, la música siguió con “Me enamoré de una bandida”, “Por un beso” y otros que calentaron la fría jornada.