Ganador de la Palma de Oro de Cannes en 1997 por El sabor de las cerezas y el Gran Premio del Jurado de la Mostra de Venecia en 1999 por El viento nos llevará, el realizador estuvo internado varias veces entre febrero y abril pasado, para someterse a cirugías intestinales, que le ocasionaron complicaciones posteriores.
Ante las dificultades del proceso de cura, el pasado 28 de junio el cineasta decidió partir a París para seguir su tratamiento con especialistas de centros franceses. Según los medios iraníes, su cuerpo será trasladado mañana a Irán para ser enterrado.
Además de la comunidad de los artistas, varias instituciones y autoridades del país expresaron su pesar en los medios y en las redes sociales. El presidente de Irán, Hasan Rohaní, escribió ayer en su página de Twitter: “La diferente y profunda mirada de Abbas Kiarostami a la vida y su defensa de la paz y la amistad, perdurará en el séptimo arte”. EFE