Los profesores y jefes de laboratorios de Fiuna, que integran el Centro de Docentes de Ingeniería (CEI), presentarán hoy ante el Rectorado una “carta de impugnación” al nombramiento del lng. Éver Cabrera como decano de esa casa de estudios.
¿Los motivos? “Carece de comprobada honorabilidad”, en virtud a dos causas penales que siguen abiertas por hechos de corrupción durante su gestión al frente del Instituto Nacional de Tecnología y Normalización (INTN).
“Por mentir al estamento docente y estudiantil”, sobre su situación jurídica y por realizar “abuso de poder” al demandar a diez estudiantes de la facultad con amparo de la directora jurídica del INTN, según mencionó el grupo de siete docentes de Fiuna que se acercó ayer hasta la redacción de ÚH.
En efecto, comentaron que fueron a verificar en la Fiscalía de Delitos Económicos y Anticorrupción si los procesos penales en contra de Cabrera seguían abiertos o no. Y corroboraron que el decano tiene dos causas abiertas (Nº 103/16 y Nº 55/16), una de ellas a cargo de la fiscala Josefina Aghemo. “El estatuto (de la UNA) dice que para ser decano, debe tener una comprobada honorabilidad y esto mancha la honorabilidad”, postuló el Dr. Jorge Molinas, ex director de Investigación.
Además, dijo, Cabrera “mintió” a todo el estamento cuando en su presentación en sociedad aseguró que “no tenía causas abiertas en su contra” y que, en contrapartida, la Fiscalía lo había “sobreseído” de un proceso judicial.
El miércoles, para peor, entabló una demanda en contra de diez integrantes del Centro de Estudiantes. “Eso es abuso de poder. Es más, la abogada que utiliza es la asesora jurídica del INTN”, refirió Molinas en alusión a la profesional Sandra Barrios.
“No puede patrocinarle, siendo funcionaria pública, en asuntos personales”, acotó el Ing. Francisco Arrom, presidente del CEI.
botín. Hasta antes de la revuelta de #UNAnotecalles, el año pasado, se supo que en Fiuna ingresaban millones de dólares para consultorías. De acuerdo con los docentes, el grupo al cual representa Cabrera y el ex decano, Isacio Vallejos, utilizaba la facultad para sus negociados oscuros. “Hay mucho dinero en juego porque hay un vacío legal en el estatuto universitario que les permite cobrar por asesorías y fiscalizaciones. Eso entra a la facultad y el decano, como ordenador de gastos, puede disponer”, refirió Molinas.
En los últimos tres años, ingresaron unos USD 10 millones a la facultad. “Hace poco nos enteramos que ingresaron más de USD 1 millón solo de Itaipú y no sabemos para qué”.