17 may. 2025

Historias de amor que van más allá de los escenarios

Por Rocío Cáceres

Miguel y Cecilia Kunert.  El guitarrista compuso  para ella la canción  Quisiera ser la mañana.  Ahora están trabajando en un nuevo material discográfico que quieren presentar este año.

Miguel y Cecilia Kunert. El guitarrista compuso para ella la canción Quisiera ser la mañana. Ahora están trabajando en un nuevo material discográfico que quieren presentar este año.

rcaceres@uhora.com.py

Compartir gustos y pasiones con la persona amada es una de las más bellas sensaciones, y de eso saben mucho Cecilia y Miguel Kunert, Rosa María Alfonso y Hugo Centurión, y Guadalupe Cacavelos de Samaniego y Abel Samaniego, quienes aparte de ser apasionados músicos, comparten una gran historia de amor.

Cecilia y Miguel Kunert tiene dos décadas de matrimonio, y el mismo tiempo compartiendo escenarios. “Nos conocimos en el pub de peña libre Calipso, donde la gente iba a cantar”, recuerda ella, y él agrega: “Una amiga (Gloria Cappello) me dijo: ‘Vení, que te voy a presentar a una chica que puede llegar a ser tu señora’ (...). La vi y ya me gustó”.

Esa noche ya se acompañaron en el escenario, y poco tiempo después se hicieron novios y formaron su grupo Cecilia y Miguel Kunert. “Seis meses después, terminamos casándonos”, cuenta Miguel.

De este amor nacieron Florencia (19) –también cantante, directora del grupo Kur– y Max (4), quienes son las mejores canciones de Ceci y Miguel, y la razón por la que esta pareja de músicos decidió desarrollar su carrera artística en Paraguay.

Como todos los años celebran su día cantando. “Yo me declaro una romántica empedernida”, confiesa Ceci y aconseja a las parejas “basarse en la tolerancia y el respeto”.

en la iglesia. Otros que trasladaron la historia de su canción favorita a su propia vida, son Guadalupe Cacavelos de Samaniego y Abel Samaniego, del grupo vocal Cantarte, que se conocieron hace 21 años (en 1995) en la parroquia Salvador del Mundo, y en ese mismo escenario se juraron amor eterno, el 12 de agosto de 1997. “Nos conocimos a través de la música en coros parroquiales, estábamos a cargo de grupos corales y nos conocimos”, recuerda Abel y su esposa agrega entre risas: “Él me quería enseñar otras músicas y yo no aceptaba”.

Luego el grupo de Guadalupe se disolvió y se sumó Abel, que en otro momento fue su catequista.

Entre canciones se enamoraron y de ese amor nacieron sus hijos Emiliano (17) y Ana Sofía (10). “Nuestras pasiones son la música y la familia”, dicen estos artistas que comparten todo. “Nuestros espacios los compartimos, tenemos la gracia de que se nos dio así”.

El secreto para disfrutar de estar juntos todo el tiempo es “el respeto”. Esta pareja, además, incluye siempre en su matrimonio a Dios como uno de los pilares fundamentales.

La canción de Abel para Guadalupe es Como el primer día, de Alberto Cortez –que piensan grabar en algún aniversario–, “porque la sigo queriendo como el primer día, el sentimiento está intacto”, asegura él y ella agrega con dulzura: “Yo quiero llegar a ser viejita contigo”.

Aniversario. Febrero es un mes más que especial para Rosa María Alfonso, del Grupo Los Alfonso, y Hugo Centurión, de Sajonia Cuatro, ya que además de celebrar hoy el Día de los Enamorados el 14, mañana festejan 15 años de matrimonio, “bodas de cristal”, añade Rosa María, quien conoció al que sería su esposo en el escenario.

“Cuando acompañaba a mis hermanos lo veía, yo todavía no cantaba”, cuenta ella al tiempo de recordar que Hugo primero conquistó a sus hermanos y su padre –todos muy celosos de la única mujer de la familia–, y luego a ella, con “serenatas y flores”, como buen músico romántico.

Se encontraban en festivales y a veces en la casa, y la música los unió. Ahora las canciones las cantan juntos, en especial en las peñas y en ocasiones como invitados de un grupo o el otro.

“Yo le dediqué hace poco la canción Distinta, del chaqueño Palavecino, porque dice en una parte que ella es una rosa pero sin espinas”, cuenta enamorado Hugo y agrega que lo que le conquistó de Rosa fue “primero su belleza y luego sus hoyuelos, y su forma de ser”.

Tuvieron dos años de noviazgo y luego se casaron. Del matrimonio nacieron Camila (13) y Giovanni (9), quienes acompañan a sus padres en sus presentaciones.

Tener la misma profesión facilita mucho la vida de estos artistas. “Nos complementamos muy bien, nos acompañamos mucho”, destacan finalmente.