Los mencionados espacios se encuentran ubicados en el Centro Habitacional Transitorio RI 14, próximamente se instalará otro en la parroquia San Pedro y San Pablo.
El objetivo es brindar protección a niñas y niños, además de ofrecer contención a sus familias y así mitigar situaciones de violencia, abusos o descuidos hacia la niñez, indican.
Las actividades en las carpas Añua se desarrollan de 08.00 a 11.00 y de 13.00 a 16.00, ofreciendo opciones recreativas lúdicas y artísticas.
Según informaron, hasta el momento y desde hace aproximadamente tres meses participan unos 160 niños, quienes también reciben contención, kits de recreación para la primera infancia, agua potable para beber, merienda diaria, además de acceso a control médico pediátrico semanal.
Los padres de los menores se muestran conformes con este emprendimiento, ya que pueden dejar a sus hijos bajo la mira de personas responsables mientras ellos salen en busca del sustento diario.
De los espacios Añua se encargan las comunidades y organizaciones comunitarias como CAMSAT, con el apoyo de Plan International Paraguay y otros socios humanitarios, así como la Secretaría de Emergencia Nacional y el proyecto Cháke Ou de preparación ante desastres, financiado por el Departamento de Ayuda Humanitaria y Protección Civil de la Unión Europea (ECHO).