Tras meses de gestiones, a través de la Embajada paraguaya en Japón y el Consulado argentino en Hong Kong, el bebé que dio a luz la paraguaya Francisca F., en estado de reclusión procesada por tráfico de drogas, fue traído al Paraguay, rescatado de un hogar de niños donde pasó sus primeros siete meses de vida.
Saludable y con signos de haber recibido muy buenos cuidados, el niño fue traído por una asistente social de la Secretaría Nacional de la Niñez y la Adolescencia, acompañada por un abogado de la Dirección de Asuntos Legales de la Cancillería Nacional.
“Es un hecho histórico, no se conoce algo similar”, cuenta el abogado Rubén Darío Ortiz, director general de la citada dependencia, contento por el resultado de las gestiones que se iniciaron meses atrás. Más aún considerando que Paraguay no mantiene relaciones diplomáticas con China.
Por eso, recurrieron al Consulado de Argentina en esa ciudad china que goza de autonomía.
“Esta repatriación es la culminación exitosa de gestiones llevadas a cabo en el marco de la cooperación jurídica y consular de nuestra Cancillería, con el apoyo invalorable de la Secretaría de la Niñez, así como de la sección consular de nuestra Embajada en Japón”, explicó Ortiz.
El pequeño quedará a cargo de una familia acogedora y no con sus familiares directos, pero siempre bajo la tutela del Estado paraguayo.
La madre es oriunda de Cuidad del Este y hasta tanto no reciba una condena que quede firme y ejecutoriada, no puede beneficiarse con el traslado a su país de origen para cumplir la sentencia, como se está intentando hacer con varios compatriotas también condenados en el exterior.
Paraguayo. El bebé tiene la nacionalidad paraguaya, pese a haber nacido en Hong Kong. “Fue reconocido únicamente por la madre, y viajó con un pasaporte otorgado por la sección consular de nuestra Embajada en Tokio, Japón”, explicó Ortiz.
Este documento es de carácter provisorio. Fue expedido solo para que el niño pueda viajar al Paraguay.
A su criterio, el Consulado argentino en Hong Kong tuvo activa participación acompañando todas las gestiones de los funcionarios paraguayos que estuvieron en contacto con Francisca, en la cárcel donde se halla guardando prisión y donde dio su consentimiento para el traslado de su niño al Paraguay.
La repatriación del bebé se realizó con base en la reciprocidad diplomática y cooperación jurídica internacional, considerando que hasta ahora el Paraguay no mantiene relaciones diplomáticas con China.