24 abr. 2024

Funcionaria boliviana que autorizó vuelo de Lamia huyó al Brasil

La funcionaria boliviana de aeropuertos que autorizó el plan de vuelo del siniestrado Lamia con la delegación del Chapecoense, pidió refugio en Brasil, ante posibles represalias en su país, mientras que el Gobierno de Evo Morales pidió su expulsión para que enfrente a la Justicia.

“Celia (Castedo) pidió refugio en Brasil ayer en Corumbá (estado de Mato Grosso do Sul, fronterizo con Bolivia, ndlr)”, informó ayer una portavoz del Ministerio Público en Brasilia.

La solicitud de la ya ex funcionaria de la Aasana (Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea) se tramita en secreto, ya que Castedo teme posibles consecuencias en Bolivia contra ella o su familia, indicó la misma fuente.

La Fiscalía brasileña no explicó, por ello, los motivos que movieron a Castedo a pedir refugio en el país del que procedían casi todas las víctimas del accidente donde falleció la mayoría de integrantes de la delegación del Chapecoense.

El humilde equipo revelación de la Copa Sudamericana viajaba a Medellín para disputar la ida de la primera final continental de su historia, un sueño que rompió la tragedia que sigue estremeciendo a Brasil. Tras su petición de refugio, Castedo podrá permanecer legalmente en el Gigante Sudamericano hasta que se entreviste con el organismo del Ministerio de Justicia que analiza las solicitudes (Conare), un proceso que podría extenderse durante un año.

Con este estatus, Bolivia deberá pedir a las autoridades brasileñas su extradición en caso de que determine que la conducta de Castedo –quien supuestamente hizo observaciones al vuelo de Lamia– fue negligente al autorizar su salida del aeropuerto de Santa Cruz el lunes. afp

Más contenido de esta sección
Las ventas al público en los comercios pyme de Argentina cayeron un 25,5% interanual en febrero pasado, golpeadas por la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores a causa de la elevadísima inflación, y acumulan un declive del 27% en el primer bimestre del año, según un informe sectorial difundido este domingo.
El mandatario decidió crear el fondo nacional de alimentación escolar esperando un apoyo total, pues quién se animaría a rechazar un plato de comida para el 100% de los niños escolarizados en el país durante todo el año.
Un gran alivio produjo en los usuarios la noticia de la rescisión del contrato con la empresa Parxin y que inmediatamente se iniciaría el proceso de término de la concesión del estacionamiento tarifado en la ciudad de Asunción. La suspensión no debe ser un elemento de distracción, que nos lleve a olvidar la vergonzosa improvisación con la que se administra la capital; así como tampoco el hecho de que la administración municipal carece de un plan para resolver el tránsito y para dar alternativas de movilidad para la ciudadanía.
Sin educación no habrá un Paraguay con desarrollo, bienestar e igualdad. Por esto, cuando se reclama y exige transparencia absoluta en la gestión de los recursos para la educación, como es el caso de los fondos que provienen de la compensación por la cesión de energía de Itaipú, se trata de una legítima preocupación. Después de más de una década los resultados de la administración del Fonacide son negativos, así como también resalta en esta línea la falta de confianza de la ciudadanía respecto a la gestión de los millonarios recursos.
En el Paraguay, pareciera que los tribunales de sentencia tienen prohibido absolver a los acusados, por lo menos en algunos casos mediáticos. Y, si acaso algunos jueces tienen la osadía de hacerlo, la misma Corte Suprema los manda al frezzer, sacándolos de los juicios más sonados.
Con la impunidad de siempre, de toda la vida, el senador colorado en situación de retiro, Kalé Galaverna dijo el otro día: “Si los políticos no conseguimos cargos para familiares o amigos, somos considerados inútiles. En mi vida política, he conseguido unos cinco mil a seis mil cargos en el Estado...”. El político había justificado así la cuestión del nepotismo, el tema del momento.