Hoy, para las 9.00, fue citado a declarar ante la Fiscalía Anticorrupción el director de Recursos Humanos de la Cámara Baja, Ricardo Vaesken, en el marco de la investigación al diputado Tomás Éver Rivas Benítez (ANR) y sus empleados privados con sueldos del Estado.
Vaesken debe prestar declaración testimonial ante el fiscal Luis Piñánez, a cargo de la investigación al diputado Rivas por hacer figurar como funcionarios públicos a tres de sus empleados privados: Reinaldo Chaparro Penayo, Lucio Romero Caballero y Nery Franco González.
El pasado 13 de marzo, seis funcionarios de la cámara que trabajan directamente con el diputado Rivas declararon ante la Fiscalía Anticorrupción que los caseros del legislador, que figuran como contratados en la institución, son en realidad sus choferes y secretario privado.
En sus testimonios los funcionarios aseguraron que Chaparro y Franco son los choferes del legislador, mientras que Romero es su secretario privado. Afirmaron que los tres realmente prestan servicios para la Cámara de Diputados.
En esa oportunidad declararon Evelin Centurión Delgado, Del Rosario Aguilera, Teresa Núñez, Andrea Benítez González, Luisa Mabel Díaz Brítez y Cristian Cáceres Duarte.
Las declaraciones concuerdan con la versión de Rivas, quien sostiene que Chaparro, Romero y Franco están “las 24 horas” con él.
investigación. El Ministerio Público aguarda un informe de laboratorio forense sobre los datos obtenidos de compañías telefónicas, que será determinante para el caso, pues permitirá saber si los empleados del diputado en algún momento fueron realmente a trabajar al Congreso o si lo acompañaron a distintos puntos del país, como sostiene Rivas.
La Fiscalía ya cuenta además con informes del Banco Nacional de Fomento (BNF) sobre el movimiento de las cuentas habilitadas para estos empleados para el cobro de sus salarios. Entre otras cosas, el agente del Ministerio Público ya conoce cómo y dónde cobraron sus sueldos los tres empleados asignados al parlamentario. Pero estos datos no fueron divulgados aún.
La investigación se abrió a raíz de una denuncia de la Coordinadora de Abogados del Paraguay en contra del diputado y los empleados por cinco delitos: cobro indebido de honorarios, estafa, lesión de confianza, enriquecimiento ilícito y tráfico de influencias. La denuncia del gremio se basa en publicaciones de Última Hora.
el caso. Reinaldo Chaparro y Lucio Romero figuran como contratados en Diputados desde el 2013, año en el cual Éver Rivas fue electo diputado, luego de ser gobernador departamental.
En enero pasado, Chaparro fue observado por un equipo periodístico de ÚH, en horario laboral, cumpliendo tareas de casero en la vivienda del parlamentario cartista, en la ciudad de Lambaré. El mismo cuenta con un salario de G. 2 millones al mes en la cámara, al igual que Lucio Romero.
Este último cumple funciones como casero de una propiedad de cerca de 1.000 hectáreas, perteneciente a la familia de Rivas, en el distrito de Mbuyapey.
Finalmente, Nery Franco González trabaja en la empresa privada de Rivas en Ybycuí. Fue observado trabajando ahí en enero y febrero.
La cifra
110.000.000 de guaraníes fueron cobrados en los últimos tres años en la Cámara Baja por los contratos de los caseros de Rivas.
La parentela del diputado en la función pública
El pasado 25 de febrero, este diario dio a conocer una nómina de los familiares directos del diputado colorado por Paraguarí, Tomás Éver Rivas, en cargos públicos.
La familia del legislador posee larga trayectoria política y varios ingresaron a la función pública durante el gobierno de Nicanor Duarte Frutos. El legislador había manifestado a ÚH que sus parientes tienen “derecho a trabajar”.
El diputado cuenta con al menos 10 familiares directos en la función pública. También tiene otros parientes políticos con cargos públicos.
La actual jefa comunal de Ybycuí y presidenta de la Opaci, María del Carmen Benítez, es la pareja del legislador, el principal referente cartista del departamento. El hijo de la intendenta e hijastro del diputado, Jefferson Giménez Benítez, es uno de los últimos miembros de la familia en haber accedido a un cargo público. Este joven de 22 años figura como contratado en la Cámara Baja desde agosto del año pasado, con un salario de G. 3.000.000. Jefferson ingresó a la institución sin concurso, según informó la misma cámara.
El mismo también había sido observado por ÚH en la casa del parlamentario en Lambaré, en pleno horario laboral.