Carlos Marcelo Aquino
LIMA-DPTO. DE SAN PEDRO
Tres personas de avanzada edad y quienes viven en precarias condiciones fueron excluidas llamativamente del programa social para la tercera edad del pago de una pensión mensual.
Juliana Cantero, 74 años; Rufino Cantero, 92 años, y Valentina Cantero, de 104 años, viven en precarias condiciones en una humilde vivienda en la compañía Cedran, distrito de Lima, San Pedro.
Explicaron que por más de dos años fueron beneficiarias de la pensión para la tercera edad y que desde noviembre pasado dejaron de percibir lo que por ley les corresponde, sin explicación alguna.
La situación en la que se encuentra esta familia es deplorable, ni siquiera cuenta con agua potable y utilizan un viejo pozo de donde acarrean el vital líquido.
En varias oportunidades intentaron obtener el motivo de su exclusión de la pensión y según los funcionarios del programa de la zona, es por disposición del Ministerio de Hacienda porque el nivel de vida de la familia tuvo un importante crecimiento.
“Es mentira, hoy vivimos de la caridad de gente de buena voluntad y vecinos, no sabemos de dónde sacaron que nuestro nivel de vida subió. Hoy estamos peor y realmente necesitamos de nuevo percibir el sueldito porque estamos en la última etapa de nuestra vida y las necesidades son múltiples”, señaló Juliana Cantero, de 74 años, quien es la menor y la que cuida de su mamá de 104 años y de tío de 92 años.
En la zona nadie sabe del porqué fueron excluidos y toda la población limeña conoce a esta familia y saben que son merecedoras de seguir siendo beneficiarias del programa del Gobierno Central.
Don Rufino ruega a las autoridades recibir nuevamente la pensión porque ya no pueden trabajar para ganarse el sustento diario que necesitan porque están con la salud muy deteriorada.