La noticia de su muerte fue confirmada a la AFP por el portavoz del hospital de la Cruz Roja, José Barata, que no precisó las causas.
Soares ingresó en el hospital el 13 de diciembre en estado “crítico”. Nunca se había llegado a recuperar completamente de la encefalitis que padeció en enero de 2013 y su salud se degradó todavía más desde la muerte de su esposa, en julio de 2015.
Tras una mejoría pasajera, el ex jefe de Estado cayó en un “coma profundo” el 26 de diciembre, debido a un “episodio agudo” cuya naturaleza no fue desvelada.
Fundador del Partido Socialista portugués, ministro de Relaciones Exteriores, dos veces jefe de Gobierno, presidente de la República de 1986 a 1996 y eurodiputado, Soares fue un personaje ineludible de la democracia portuguesa.
“Nunca me he considerado especial. Soy alguien normal”, defendió, no obstante, en una entrevista aparecida en febrero de 2015 Soares, abogado de formación, que empezó pronto en política, como opositor a la dictadura de Antonio de Oliveira Salazar.