Un joven, apoyado por una imagen, manifestó su sorpresa al encontrar una máquina expendedora de preservativos en el baño de hombres del centro comercial. “La verdad a mí me sorprendió sabiendo que hay familias que van. Criaturas. Como sea. Solo pedía opiniones (sic)”, dijo el cliente.
Las reacciones de los internautas no se hicieron esperar. Conforme la gente compartía el posteo, aumentaban también las críticas por la “insólita” reacción de Eduardo Morales que fue compartida 200 veces y tiene más de 320 comentarios.
Alejandro Brugada, encargado de Marketing del Villamorra Shopping, comentó que todo el pasado fin de semana hicieron un atento seguimiento al reclamo y al debate que se generó en las redes sociales. Las críticas a la iniciativa “revolucionaria” fueron más positivas que negativas y es por eso que desde su página de Facebook y cuenta de Twitter el shopping reafirmó que los expendedores seguirán allí.
“En febrero colocamos las máquinas y a nadie le pareció muy raro, por eso nos sorprendió esa publicación”, comentó, resaltando que primero se mantuvieron al margen de todo y les sorprendió que la gente se haya volcado a defender la iniciativa del centro comercial.
En el baño de mujeres también hay máquinas expendedoras, pero de toallas higiénicas.
“Para nosotros es positivo que se hable de esto, nos enseña a no mirar solo de costado y a apostar a este tipo de estrategias, sin miedo, buscando siempre mostrar y enseñar algo a la gente”, resaltó.
EN CONTRA. Juan Vera, de la Federación de Asociaciones por la Vida y la Familia (Fedavifa), dijo que en la iniciativa del shopping hay una abierta promoción de la promiscuidad sexual, más allá de lo que sería la responsabilidad que se genera en el marco de los principios de la fe cristiana, que es el marco de una relación más seria.
La Dra. Sully Suárez, del Programa Nacional de Control de ITS/Sida (Pronasida), dijo que siempre habrá gente que se oponga a la distribución de preservativos y que en todos los puestos de salud hay máquinas expendedoras de condones.
“La gente toma esto como que uno incentivaría la relación sexual, pero la sola presencia del preservativo está demostrado que no lo hace y es algo a lo que una persona puede acceder o no de acuerdo a lo que sabe del uso, porque si no sabe qué previene tampoco lo va a usar”, destacó la especialista.