Por Vanessa Rodríguez | Misiones
Don Antolín tiene 19 hijos con doña Nicolasa Aranda, tienen 59 nietos, 80 bisnietos y cuatro tataranietos, un total de 162 descendientes directos.
Don Antolín se levanta a las 05.00, toma mate a las 06.00 y desayuna a las 07.00, consume todos los días dos huevos duros, un café con leche y dos galletas. Almuerza al mediodía y exige que sus familiares le acompañen.
A su edad sigue administrando sus bienes y tomando decisiones, está lucido y no siente dolor en el cuerpo.
El festejo de hoy se preparó desde el mes de marzo a pedido del mismo, que delegó a cada uno de sus hijos las tareas a realizar, según expresó su hija Eva Sánchez Aranda.
La jornada de hoy empezó a las 05.30 con la serenata de sus hijos y la explosión de petardos. A las 09.00 se realizó la celebración eucarística, a cargo del capellán Ermes González, párroco de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.
Luego de la misa se fueron al domicilio de don Antolín, donde los integrantes de la Banda de Músicos de la Segunda División de Caballería brindaron una serenata con temas épicos, le entregaron un reconocimiento, a cargo del general Bernardino González, comandante de la Segunda División de Caballería, en representación del Ejército paraguayo.
También le llevaron un presente los integrantes del Ballet Municipal Mbrurukuja Poty de San Patricio y los integrantes de la Orquesta de Cámara del Centro Cultural “Vy’a raity” de la comunidad le llevaron una serenata, mientras que el intendente municipal, Fabián Almada, junto a los funcionarios y los concejales municipales le entregaron reconocimientos.
Se realizó un grandioso almuerzo donde participaron familiares, amigos y vecinos. Para el acontecimiento faenaron dos novillos y prepararon 240 kilos de torta, además de 120 kilos de sopa paraguaya.
Sus propios hijos y nietos se colocaron delantales adornados acordes al festejo campestre y sirvieron a los invitados. Se vistieron con las prendas que caracterizan al hombre del campo.
Destacadas autoridades se acercaron a saludarle, entre ellos el mismo senador Fernando Lugo, quien participó de la misa y compartió un rato en su vivienda.