19 abr. 2024

En once días hubo dos secuestros de colonos en zona de influencia del EPP

No pasaron dos semanas para que haya otro ataque en San Pedro. Ocurrió en horas de la siesta de la víspera, a menos de 50 km del lugar del plagio del 21 de agosto pasado. FTC hizo rastrillaje, sin éxito.

Foto: UH Edicion Impresa

Foto: UH Edicion Impresa

Carlos Marcelo Aquino

SAN PEDRO

Solo pasaron once días para que se vuelva a cometer otro plagio en el Departamento de San Pedro, a menos de 50 kilómetros de distancia del lugar donde el EPP cometió el plagio de Franz Hiebert. Ayer, la víctima fue Bernhard Blatz Friessen (22), nuevamente un colono de Río Verde.

Como parte de una estrategia de seguridad, los menonitas de las colonias de San Pedro abandonan sus tareas en los cultivos en horas de la siesta. Es por eso que Peter Blatz, su hijo Bernhard y un capataz iban saliendo de la zona de cultivo de granos y se dirigían al casco central de la Estancia Lucipar, en Santa Rosa del Aguaray.

El padre del secuestrado relató que estaban a unos tres km del casco del establecimiento cuando fueron interceptados por desconocidos, una supuesta célula del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).

Este menciona que su hijo iba manejando una camioneta Toyota Hilux e iba estirando una cuchilla de cosechadora. A unos 200 metros detrás de la camioneta estaba Peter manejando la maquinaria, y lo acompañaba el capataz, con quien trabajaba para producir las 500 hectáreas que alquilan.

ASALTO. Eran aproximadamente las 13.00 cuando en el camino aparecieron unos seis hombres vestidos con vestimenta camuflada y portando fusiles de asalto. Estos ordenaron detener la camioneta y obligaron a Bernhard a descender y acompañarlos.

Cuando Peter se percata de que su hijo estaba siendo retenido aceleró la marcha de la cosechadora como para auxiliarlo, pero los milicianos respondieron con disparos de fusil deteniendo el avance.

En ese momento, el padre intenta retroceder para buscar ayuda, pero a aproximadamente 700 metros queda varado, ya que uno de los tiros le dio en el neumático. Baja de la máquina y busca ayuda.

AUXILIO. Aproximadamente unos 200 colonos menonitas llegaron hasta la zona donde fue interceptado el joven Bernhard, pero allí ya no había rastros ni de la banda criminal ni de la víctima.

Luego, hasta el lugar llegaron los efectivos de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC). Con helicópteros, empezaron a revisar el lugar; además otro contingente ingresó a la zona boscosa que rodea la estancia Lucipar.

Lastimosamente, la reacción de la FTC no tuvo éxito. Lo único que se pudo es levantar como evidencias las vainillas servidas de los disparos que los secuestradores realizaron contra la cosechadora.

De forma preliminar, indicaron que se trataría de vainillas servidas de proyectiles calibre 5,56, que son utilizadas para armas de asalto como fusiles AR-15, M-16, Galil, carabina M-4, entre otros.

SOSPECHAS. Los investigadores tienen la sospecha que el grupo que secuestró ayer a Bernhard sería el mismo que el 4 de setiembre del 2015 había atacado en la estancia El Siervo donde quemaron dos tractores, dos vehículos y una moto.

Esta célula que se desprende del primer anillo epepista que estaría liderada por el mismo subcomandante Santiago Vázquez, que es el alias de Manuel Cristaldo Mieres.

En aquella oportunidad, los epepistas tomaron de rehenes a cuatro campesinos y tres menonitas; y habían ordenado dejar el desmonte y el monocultivo, amenazando que, de lo contrario, serían blancos del EPP.