Si bien el Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT) apela a mantener en el anonimato a los donantes de órganos, los compañeros del médico fallecido decidieron revelar su identidad en un emotivo homenaje.
En la conferencia de prensa se destacó el gesto altruista del médico Juan Gabriel Berdejo, quien era integrante del equipo de ablación y cirugía vascular del Instituto de Previsión Social (IPS).
Un trágico accidente de tránsito terminó con sus sueños el pasado domingo, pero su filosofía de vida quedó impregnada.
El profesional no solo realizaba la ablación de órganos para los trasplantes, sino también se inscribió en su momento como donante y esa decisión sirvió para que cinco personas mejoraran su calidad de vida al recibir sus córneas, riñones y el corazón.
Gustavo Melgarejo, jefe del Servicio de Diligenciamiento de Órganos y Tejidos del IPS, dijo estar dolido porque uno de los miembros del plantel médico perdió la vida. Sin embargo, dijo que el fallecimiento del médico Juan Berdejo marca un rumbo importante en la donación y trasplante de órganos.
Recordó que su colega acompañó varios procedimientos de donación dentro y fuera de la previsional. Le calificó como una persona comprometida, responsable y honesta; “el modelo de médicos que queremos en el IPS”, expresó.
APOYO FAMILIAR. Melgarejo resaltó en todo momento el apoyo familiar del médico para que se pueda realizar la ablación de sus órganos. “Fue su familia la que nos dio la fuerza y valentía porque era una situación particular para nosotros”, expresó.
Al jefe médico le quedó grabada una de las frases del hermano de Juan Gabriel: “Que su muerte sirva para que la historia de los trasplantes cambie el Paraguay”. Por eso destacó que la muerte de su colega dio vida a otras cinco personas.
Le fue gratificante observar contentos a sus padres en el velorio porque su hijo fue donante y mejoró la calidad de vida de otras personas. Por esa razón, expresó que la donación, más allá de dar vida, “da cierto sentido de la muerte”.
ÁNGEL DEL TRASPLANTE. Para el cirujano vascular Agustín Saldívar es una satisfacción saber que todos los procedimientos en el trasplante de órganos del médico fallecido fueron exitosos. “Realmente es una aliciente para que, a partir de ahora, Juan sea el ángel de los trasplantes”, manifestó.
Valoró el altruismo de su colega y pidió que su gesto sirva como ejemplo, porque en el país hay muchas personas que necesitan de médula ósea, corazón, pulmón, riñón, páncreas, hígado u otros órganos.
“Para nosotros, el caso de Juan es un mensaje claro que la filosofía del trabajo diario se convierte en un fin”, valoró.
DIFÍCIL SITUACIÓN. El jefe del Servicio de Cirugía Cardiovascular, Roberto Filizzola, mencionó que Juan Berdejo estuvo a su lado en varios procedimientos. También lo calificó como una excelente persona y un profesional capaz.
Dijo que realizar la ablación de sus órganos fue una situación difícil porque se trataba de unos de sus compañeros.
“Nosotros somos hermanos, esposos, padres y este es un drama humano que nos llegó a todos”, reflexionó, al tiempo de destacar al equipo médico y su profesionalidad para hacer frente a esa angustia.