El pequeño robot acuático tiene medio metro de largo, con una cola de silicon de 23 centímetros y simula ser un pez. El objeto fue creado por el equipo de científicos del Laboratorio de Inteligencia Artificial y Ciencias de la Computación del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT).
Los investigadores revelaron a la revista Science Robotics que SoFi puede nadar en el océano a profundidades de hasta 18 metros debajo de la superficie y funciona a base de una batería que dura 45 minutos. Esto se debe a que no posee ningún cable conectado a algún bote o hélice como sistema de propulsión.
Con esto se busca que el robot interactúe con otros animales en los ecosistemas marinos sin llamar la atención.
El objetivo que se cumplió como el primer experimento fue en un arrecife de coral ubicado a las afueras de Fiyi, en el cual sus creadores lo vieron nadando con otros peces. “Me impresionó lo bien que funcionó, lo mucho que pude mover su cola de un lado al otro”, comentó Robert Katzschmann, un estudiante de posgrado del MIT, quien encabeza el equipo.
Los científicos buscan a través de sus investigaciones proteger la vida marina que se encuentra en peligro ante la actividad humana y el cambio climático, según informó el New York Times.
SISTEMA DE COMUNICACIÓN
Debido a que el pequeño robot no tiene cables, el sistema de comunicación resultó un desafío ya que las señales remotas que se utilizan para pilotear objetos aéreos como drones, no son las mismas que las que se usan debajo del agua.
Los estudiantes crearon entonces un lenguaje codificado con ondas sonoras entre SoFi y un buzo, asignando una serie de tonos a cada tipo de información. “Más o menos de la misma forma en que los tonos de marcado representan los números cuando se hace una llamada telefónica. Un sistema de procesamiento decodificaba y transmitía los mensajes para decir al buzo cosas como: SoFi está nadando hacia adelante, o dar una instrucciones ", señaló el estudiante al medio.
Ante la duda de qué pasaría si un pez real como alguna ballena o tiburón se tragara a SoFi, Katzschmann respondió: “Si un tiburón llegara y se comiera a nuestro pez, tendríamos las grabaciones más increíbles”, afirmó.