Carlos Elbo Morales
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Cuando la familia de Mario Galeano supo el resultado de sus análisis, vivió dos emociones al mismo tiempo. La tricoleucemia que le detectaron tenía altas posibilidades de cura, pero para cubrir todo el tratamiento necesitaban unos G. 35.000.000
“Yo gano solamente el sueldo mínimo, ¿de dónde iba a conseguir la plata? Para empezar necesitábamos unos G. 20.000.000. Pero la noticia de que la enfermedad de mi hermano era curable fue más fuerte que ese inconveniente”, dice Maru Galeano, hermana de Mario y coordinadora del Facebookton desde la fanpage Hechakuaa, la iniciativa con la cual empezó la campaña para recaudar el monto que necesitaba.
El camino. Cuando Maru y su familia se reunieron para estudiar las alternativas que tenían para recaudar el dinero, llegaron a la conclusión de que ningún paraguayo debía llegar a la situación en la que se encontraban ellos. El problema era el sistema de salud. Por tal motivo eligieron hacer una campaña que más que un enfoque caritativo apuntaba a ser una denuncia ante esa situación. Optaron por la red social Facebook, pues es la más utilizada por la mayoría de las personas.
El Facebookton pensaba en el ciudadano del día a día que muchas veces ni siquiera gana el sueldo mínimo y menos tiene un seguro social. Es un reclamo al acceso a la salud universal, a la salud y de calidad. “Teníamos que asumir que era nuestro derecho y que oñondivepa, con el Hechakuaa podemos salvar una vida”.
Llegar a la meta, porque creemos en la gente que muchas veces de manera aislada se ayuda. Con esta iniciativa apuntábamos a organizar esa solidaridad y dejar un legado al pueblo”, expresa convencida la joven. Agrega que si se estipula al menos un 10% de impuesto a la soja, se podrían tener fondos para enfermedades como estas.
La campaña no solo llegó a amigos, conocidos, el pueblo de Yatytay, su patria chica, y personas anónimas que dieron su aporte y apoyo. La repercusión mediática tuvo el apoyo de referentes comunicacionales. El impacto también logró que el director del Incan, Julio Rolón, entregue un aporte de G. 17.000.000 para costear el tratamiento de Mario.
A casi un mes de la iniciativa, la campaña ya ha superado los G. 32.000.000. También otras personas han empezado a replicar la iniciativa. Maru, aún sorprendida por la repercusión, resume en unas palabras el resultado de todo el esfuerzo conjunto: “Lo que estamos viviendo es un triunfo de la esperanza y la solidaridad organizada”.