El uniformado está en poder del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), mientras que el ganadero está en cautiverio a manos del grupo autodenominado Ejército del Mariscal López (ELM), liderado por Alejandro Ramos.
El secuestro de Edelio Morínigo es el más largo en la historia del Paraguay. Lleva 1.313 días en manos de sus captores. Durante este tiempo solo se dio a conocer una prueba de vida. Para el grupo armado, Edelio es considerado como prisionero, por lo que habían pedido la liberación de seis de sus miembros, presos en distintas cárceles del país, y a cambio de eso dejarían ir al suboficial.
Doña Obdulia Florenciano, madre de Edelio, dijo ayer que irá hasta el Departamento de San Pedro para visitar a los colonos menonitas liberados por el EPP con la esperanza de saber algo de su hijo, pese a que ya escuchó a través de los medios de comunicación que tanto Blatz como Hiebert desconocen el paradero de su hijo. “Por él no se pidió plata, él está como prisionero de guerra, se debe liberar a seis epepistas para que pueda haber negociación o si no, no habrá, había dicho el grupo”, recordó.
Su secuestro se registró el 5 de julio del año 2014, cuando Edelio fue de cacería con amigos a la estancia Macchi Cué, ubicada a 100 kilómetros de la ciudad de Concepción. Una vez que entraron al monte –como unos cuatro kilómetros– salieron al paso siete integrantes del EPP.
Al percatarse de ello, el suboficial de Policía se tiró al suelo y se despojó de su arma reglamentaria, su credencial de uniformado y su billetera.
Uno de los secuestradores, quien presumiblemente sería Osvaldo Villalba, les habría dado la orden de permanecer boca abajo, los separó e interrogó de a uno; les preguntó qué hacían en el lugar y si se dedicaban al abigeato. El interrogatorio duró desde las 14.00 hasta las 16.00. Luego, el policía fue llevado por el grupo armado.
La última vez que los familiares de Morínigo recibieron una prueba de vida fue el 22 de octubre del 2014, cuando apareció en un video junto al joven Arlan Fick, en cautiverio en el medio del monte.
Urbieta. El ganadero Félix Urbieta, secuestrado por el grupo de Alejandro Ramos, lleva en cautiverio 482 días.
Los familiares del secuestrado en reiteradas ocasiones pidieron al grupo armado una nueva comunicación y prueba de vida para seguir con las negociaciones tendientes a la liberación.
En ese sentido, Liliana Urbieta, hija de Félix, indicó días atrás que hace un año que pide otra prueba para pagar el rescate, asegurando que ya tienen el monto solicitado. De acuerdo a los datos que se manejan, el monto solicitado por los secuestradores sería de US$ 350.000 para su liberación.
La última prueba de vida se dio a conocer el 25 de enero de 2017, en la que su padre hacía referencia a las fiestas patronales realizadas en su comunidad Belén Cué, y al resultado del partido de fútbol entre Paraguay y Chile.
Urbieta fue interceptado en la noche del miércoles 12 de octubre de 2016 por dos desconocidos, en el interior de su estancia San Francisco, ubicada en la compañía Belén Cué, a unos 15 kilómetros de la ciudad de Horqueta. Primeramente, los secuestradores soliciaton 500.000 dólares para liberar al ganadero.
caaguazú. Otro caso que aún está abierto es el secuestro del brasileño Alecio Dresch, de 73 años, y su nieto de 12. Agentes policiales y fiscales siguen en busca de pistas para esclarecer el caso y dar con el paradero de las víctimas. Por este caso, siete personas están detenidas. Ambos fueron secuestrados el 23 de octubre pasado en la colonia Margarita, Nueva Toledo de Caaguazú, mientras estaban trabajando.