Los detenidos, cuyos datos no se dieron a conocer, pertenecen a un refugio de damnificados que se instaló en la zona, y son quienes primeramente iniciaron los incidentes con los vecinos.
Luego se comunicó el hecho a la Comisaría 8ª Metropolitana y los agentes acudieron. Al llegar la patrullera, los agentes fueron recibidos con una lluvia de piedras, que ocasionaron varios destrozos, tanto en el móvil oficial como en otros vehículos que se hallaban estacionados en la zona. Posteriormente se inició un enfrentamiento con los uniformados, del que un suboficial resultó herido. También hubo destrozos de cámaras de seguridad del 911 y el robo de los objetos que se encontraban dentro de un auto de uno de los vecinos.