Los bisnietos de Mangoré relatan que cuando decidieron iniciar los trámites en la Sociedad Argentina de Autores y Compositores (Sadaic) para inscribir y registrar las partituras de Agustín Barrios, se encontraron con la sorpresa de que “no podían hacerlo, porque ya figuraba como miembro de la American Society of Composers, Authors and Publishers (Ascap) desde el 10 de noviembre de 2013 a la actualidad, coincidentemente con la fecha aproximada en la que Manuel (Odilón Barrios) obtuvo la declaratoria a su favor”.
El comunicado señala que las obras de Mangoré también se registraron en la Sociedad de Gestión Colectiva de Suecia hasta el 30 de junio de 2008.
PRUEBAS. “Estas irregularidades se dan en un contexto simple: fuimos ignorados sistemáticamente. Para corroborar esta información, podemos dar a conocer las pruebas necesarias para demostrar no solo nuestra existencia desde hace casi 50 años, sino también los trámites iniciados por el hijo de Mangoré Pedro Virgilio y continuados por su familia”, sostienen los herederos.
La carta está firmada por Marcelo Enrique, Julián Rodríguez, Carmen Francisca y Claudia Rodríguez Barrios, reconocidos por la Justicia como descendientes directos de Mangoré en diciembre de 2014, y también lo hizo anteriormente con Manuel Odilón Barrios, aunque el mismo es descendiente colateral por parte de un hermano de Agustín, Héctor Leocadio Barrios.
“En un acto de mezquindad, Manuel (Odilón Barrios) traba de manera continua los procesos legales”, dicen los herederos de Mangoré.
