La equidad sigue siendo uno de los desafíos más importantes del Gobierno en materia fiscal. De acuerdo con el Informe 2017 de Finanzas Públicas del Paraguay, presentado ayer por el Ministerio de Hacienda, los contribuyentes que registran una mayor facturación tributan al Fisco menos del 1% de sus ingresos en impuestos directos.
El estudio hizo una comparación de la tasa efectiva pagada por los aportantes en impuestos directos y su nivel de ingresos, donde se refleja que aquellos de menores ganancias (decil 1) tributan el 0,17% de sus ingresos en promedio. Mientras que aquellos de mayores ganancias (decil 10) tributan el 0,54% de sus ingresos (ver infografía).
Los impuestos directos son aquellos que gravan los ingresos económicos de las personas. En esto se engloba al Impuesto a la Renta Personal (IRP), el Impuesto a la Renta de las Actividades Agropecuarias (Iragro) y el Impuesto a la Renta Comercial, Industrial y de Servicios (Iracis).
Para tener una idea de quienes están sujetos a este análisis, el informe señala que el 76% de los impuestos directos son pagados por los deciles más ricos de la población. Según estadísticas de la Subsecretaría de Estado de Tributación, los contribuyentes que pagan este tipo de impuestos son 299.840.
La exposición del Informe de Finanzas 2017 estuvo a cargo del viceministro de Economía, Humberto Colmán, y la directora de Política Macrofiscal, Viviana Casco.
Deducciones. Según el Fisco, esta baja contribución no solo se debe a la poca presión fiscal, sino que está explicada por la baja tasa impositiva, y especialmente, por las deducciones que son permitidas en los gravámenes.
Limitar la deducibilidad en impuestos como el IRP y el Iragro es una de las metas del Gobierno para aumentar los ingresos fiscales, aunque este plan genera mucho rechazo en el sector empresarial. En las últimas semanas, la gestión de la SET está siendo muy cuestionada, debido a supuestos abusos en sus atribuciones, reparticiones de multa y falta de mayor control a la evasión.
En cuanto a los impuestos indirectos (IVA, Impuesto Selectivo al Consumo), en el reporte se puede observar que la tasa efectiva es mayor que la de los directos, confirmando la inequidad fiscal. El documento indica que los de menor ingreso pagan una tasa del 2,08% y los de mayor ingreso 3,24%.
El Informe de Hacienda hizo énfasis además en el manejo prudente del gasto en el 2016 y 2017, mediante la contención del gasto salarial y la racionalización de los gastos corrientes. También se habla de las proyecciones de ingresos y gastos, sostenibilidad de la deuda y presupuesto 2018.
Universidad pública, ¿para ricos?
El Informe de Finanzas Públicas presentado por Hacienda también revela que los gastos del Estado destinados a universidades públicas terminan beneficiando principalmente a la población con más ingresos.
El documento señala que los cuatro deciles más ricos se llevan cerca del 80% del total de los ingresos del Estado destinado a la educación pública universitaria.
Los cuatro deciles más pobres, por su parte, se llevan el 60% del gasto público en educación primaria, el 50% del gasto en la educación secundaria y el 13% del gasto en la terciaria.
“En consecuencia, los gastos en educación primaria y secundaria son pro pobres. Mientras que el gasto en educación terciaria, si bien no es pro pobre, tampoco es regresivo”, concluye esta parte del análisis.